Ilusión. La palabra que sintetiza el sentimiento de la Selección Argentina de fútbol, a horas del estreno en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda. Julieta Cruz, la capitana del equipo que conduce Germán Portanova, no es la excepción y dejó en claro  la ilusión del equipo de "hacer historia" de cara al partido debut contra Italia. El logro obtenido por las Football Ferns de Nueva Zelanda, que consiguieron un valioso triunfo ante un seleccionado top como el de Noruega, en el partido inaugural en Auckland, sirve como un buen incentivo a repetirlo.

"Estamos enfocadas en el trabajo que venimos haciendo en todo este tiempo, siempre queremos sacar ese plus argentino que tenemos adentro. Ojalá se dé un lindo resultado y la posibilidad de hacer historia", dijo Cruz en una rueda de prensa en el Michael's Ave Reserve, el club donde se entrena la Selección albiceleste que buscará en esta novena edición mundialista, en la cuarta participación albiceleste, ganar por primera vez.

Sobre si las motivan resultados sorpresa como el de Nueva Zelanda, la mendocina consideró que "es un Mundial y está dicho" y agregó: "Creo que todas las selecciones pueden innovar o dar resultados inesperados porque es una Copa del Mundo y es totalmente distinto a todo lo demás. No siempre reina el buen juego y creo que la actitud, las ganas de ir para adelante y de ganar se notaron en el primer partido del torneo".

Cruz, de 27 años, nació en la localidad mendocina de General Alvear y juega de lateral derecha en Boca, que en esta temporada obtuvo el tricampeonato local con Las Gladiadoras tras vencer en el desempate a la UAI Urquiza, y es una de las madres del plantel junto a Vanina Correa y Lorena Benítez.

La mamá de Narella Sofía Cruz (4 años) jugará su primer Mundial, ya que la Copa de Francia 2019, a la que Argentina se clasificó después de 12 años de ausencia, la vio por televisión. En ese momento, trabajaba en la fábrica de alfajores de una amiga y con Carolina Troncoso, su compañera en Boca, se juntaban a ver los partidos. Las dos habían firmado su primer contrato profesional y seguían por TV a "las pibas", muchas de las que ahora son sus pares en la Selección.

Hoy, la tricampeona xeneize logró recuperarse de una lesión en tiempo récord y fue convocada por Germán Portanova para la nómina de 23. Cuando el DT dio la lista en la concentración del predio de AFA y dijo su nombre y el de Yamila Rodríguez, que estaba a su lado, ambas se largaron a llorar. "Y la seguimos en la pieza con el llanto, mucha emoción", recordó.

Cruz sufrió, en abril de este año, una rotura de ligamento colateral interno de la rodilla derecha durante el Superclásico que Boca le ganó 3 a 0 a River. Con el apoyo del cuerpo médico y técnico de su club, Julieta se rehabilitó y pudo jugar la última parte del campeonato, lo que le dio también la chance de seguir disponible para el seleccionado.

"Después de la lesión que sufrí me costó adaptarme al ritmo futbolístico, pero físicamente me siento bien. Estar entre las 23 es un logro personal para mí porque hasta hace poco no sabía si llegaba. Hoy me siento bien, tranquila, con muchas ganas y siempre a disposición del técnico para cuando me necesite como todas las que estamos acá. Si me toca entrar voy a dejar todo", aseguró la número 4 de Argentina.

En Auckland no para de llover. Este viernes, Portanova debió cambiar de planes por segunda vez para no arriesgar el físico de las futbolistas y entrenar en el gimnasio y en una cancha cubierta de futsal. "El clima es adverso, es un tema, pero estamos enfocados en el trabajo que venimos haciendo en todo este tiempo, adaptándonos a los entrenamientos, al cambio horario, a las condiciones climáticas", admitió Cruz.

De todas formas, Julieta subrayó que "para todos es igual y venimos bien trabajadas desde Argentina y con ganas de poder llevar a cabo lo que hemos entrenado. Adentro, en el gimnasio, o afuera, estamos concentradas y teniendo en vista el partido contra Italia. Es en lo que pensamos".

Con respecto al grupo, Cruz destacó la unión. "Estamos unidas, nos llevamos muy bien, tenemos buena conexión entre la gran mayoría del plantel. Tratamos de compartir la mayor parte del tiempo, tanto futbolísticamente como con anécdotas, juegos, charlas, mates... Eso une mucho al equipo, suma y tarde o temprano se nota en la cancha. Somos un equipo muy unido y con ganas de ir para adelante", remarcó la lateral, que como todo el plantel le hace honor a la palabra "ilusión".