Más de 150 futbolistas de 25 selecciones le presentaron, en octubre de 2022, una carta al presidente de la FIFA, Gianni Infantino, en la que exigían mejores condiciones y premios. Esta fue la mayor acción colectiva llevada a cabo por las deportistas. Como respuesta a este reclamo, en marzo de 2023, la entidad anunció que destinará 152 millones de dólares para quienes participen del Mundial, que es un monto tres veces mayor a lo que ofreció en Francia 2019 y diez veces superior a Canadá 2015. Cada jugadora cobrará 30 mil dólares por disputar el Mundial, cifra que irá aumentando a medida que pasen las diferentes fases, hasta los 270 mil dólares que obtendrá cada campeona. Por su parte, las Selecciones que integren la fase de grupos percibirán 1.560.000 dólares en premios, que se irán incrementando hasta los 4.290.000 dólares que recibirá la Federación que se consagre en Australia-Nueva Zelanda el 20 de agosto.
También hubo mejoras en otros aspectos, ya que se otorgaron las mismas condiciones que a las Selecciones que disputaron el Mundial masculino de Qatar 2022, como los estándares de los traslados, los hospedajes y las instalaciones para las prácticas. En relación a esto, Aldana Cometti, defensora argentina de 27 años, declaró para el Sindicato Mundial de Futbolistas Profesionales (FIFPRO): “Todos estos complementos de alojamiento, de viaje, de cada aspecto de la preparación, nos han permitido dejar de preocuparnos por otras situaciones. Algunas cosas no estuvieron tan bien en la última Copa del Mundo, pero ahora nuestra mente va a estar cien por cien centrada en los partidos y los entrenamientos”. Además, sobre los logros obtenidos a nivel colectivo, agregó: “Cuando nos juntamos, cuando todas tenemos un objetivo común y avanzamos, sea del país que sea, sea del equipo que sea, conseguimos grandes cosas”.
La jugadora de Madrid CFF, que está disputando su segundo Mundial, fue parte del proceso por el que pasó la Selección Argentina los últimos años para llegar a este presente. En septiembre de 2017, el seleccionado femenino de fútbol emitió un comunicado en el que las jugadoras manifestaron que los viáticos ofrecidos por la AFA no cubrían los gastos correspondientes, que no cumplían con ciertas condiciones básicas (habían viajado el mismo día que debían disputar un amistoso contra Uruguay a la madrugada y tuvieron que dormir en un micro hasta la hora del encuentro) y no contaban con instalaciones adecuadas para entrenarse, como vestuarios acordes a la cantidad de jugadoras y una cancha de césped natural.
En este contexto, manifestaron que no se presentarían a las convocatorias realizadas por la AFA, mientras que hicieron hincapié en que estaban dispuestas a buscar de manera conjunta soluciones para mejorar la situación en la que estaban. En 2018 fueron a Chile a disputar la Copa América y, en la formación inicial, las jugadoras imitaron al Topo Gigio, al estilo de Juan Román Riquelme, pidiendo ser escuchadas. Consiguieron clasificarse al Mundial de Francia 2019 (desde la primera Copa del Mundo oficial que se disputó en 1991 solo habían estado presentes en Estados Unidos 2003 y China 2007) y lograron sumar sus primeros dos puntos (0-0 vs. Japón y 3-3 vs. Escocia) y convertir su primer gol de la mano de Milagros Menéndez. En Nueva Zelanda buscarán, entonces, su primera victoria mundialista.
En el otro extremo del torneo se encuentra Estados Unidos, que fue protagonista de todas las ediciones y es la máxima ganadora, con cuatro estrellas: China 1991, Estados Unidos 1999, Canadá 2015 y Francia 2019. Además, fue subcampeona en Alemania 2011 y consiguió el tercer puesto en Suecia 1995, Estados Unidos 2003 y China 2007. Sin embargo, recién en 2022 hubo un acuerdo histórico, tras años de lucha por parte de las jugadoras y luego de una demanda colectiva contra la Federación, mediante la cual obtuvieron un pago de 24 millones de dólares y un convenio que contempla igualdad de salarios, premios, ingresos comerciales, beneficios y el uso de lugares de entrenamiento y alojamiento similares.
Sin embargo, las pioneras en conseguir derechos igualitarios entre hombres y mujeres fueron las noruegas. Ada Hegerberg, la primera mujer en ganar el Balón de Oro en 2018, renunció a la Selección luego de la Eurocopa 2017 por el trato diferenciado con respecto a la rama masculina y, aunque se mejoraron los salarios, ella declaró: “No se trata sólo de dinero, se trata de la preparación, de actuar, del profesionalismo”. Luego de estar casi cinco años ausente en la Selección, la delantera vuelve a vestir la camiseta de Noruega y a representar a su país en esta Copa del Mundo.
De las 211 Federaciones asociadas a la FIFA, Australia, Nueva Zelanda, Brasil, Inglaterra, España, Irlanda, Países Bajos y Canadá, presentes en el Mundial 2023, son de los pocos países que entraron en el camino del “Equal pay”, con el objetivo de buscar que tanto las selecciones masculinas como femeninas tengan iguales salarios, premios y ganancias por derechos de imagen.
Argentina todavía no está en esa senda, pero Estefanía Banini, referente de la Selección, aseguró: “Me gustaría que el fútbol femenino siga creciendo, que sea más equitativo, sin estereotipos y que sirva para dejarle un camino a las nuevas generaciones, empujando la igualdad más allá de lo deportivo, para que todos tengamos las mismas posibilidades”.