Hasta a un transportador le dificultaría medir el ángulo de giro que tomó Antonio Aracre. Es que, en solo cuatro meses, el exCEO de Syngenta pasó de ser el jefe de asesores de Alberto Fernández a respaldar y festejar cada una de las propuestas económicas de Patricia Bullrich, aún cuando éstas son catalogadas como incoherentes hasta por los propios economistas del PRO. Aracre apoya no sólo la inmediata salida del cepo cambiario que prometió Bullrich en caso de ser gobierno, sino también respalda a la precandidata con su idea de "blindar" la economía con otro préstamo millonario del FMI, en una iniciativa que huele a 2001.
"Quien no planifiica terminar con el cepo rápidamente no confía en la solidez fiscal del plan económico que le presentará a la sociedad", posteó este jueves Aracre en su cuenta de Twitter, con cada vez más publicaciones, a partir de su salida de Syngenta y, sobre todo, tras su paso fugaz por la Casa Rosada. Y redobló la apuesta, al arrobar a la precandiata y destacar su "coraje y liderazgo".
Pero no fue un mero apoyo en un solo tuit. El giro del exasesor del presidente -que lleva adelante un ciclo de entrevistas a políticos- viene siendo constante vía Twitter, cuando, por caso, se preguntó por qué "se hace tanto revuelo por la palabra Blindaje", ante las críticas a la propuesta de Bullrich que parece haber tomado el manual económico del 2001.
En la defensa a la exministra, Aracre continuó: "Lo que no se haga en los primeros 90 días nos se hace más. Blindar es proteger e incluso puede incluir la regulación de capitales", mientras insistió por una salida exprés del cepo cambiario, sin importar los dólares que posea el Banco Central.
Lo extraño es que pese a estos apoyos, Aracre no votará a Patricia Bullrich. Al menos no dijo eso publicamente. Tampoco será coherente con su posición de meses atrás, ya que también aseguró que no pondrá en la urna una boleta de Unión por la Patria. Su elegido pareciera ser Juan Scharetti, aun cuando en sus encuestas ni siquiera lo tenga en cuenta como posible ganador.
Su paso fugaz por la Rosada
A fin de año, Aracre levantó la copa y brindó por un buen 2023. Lo esperaba un desafío con todas las letreas: ser el jefe de asesores del presidente de la Nación. El despacho estaba vacante tras la renuncia de Julián Leunda, quien quedó envuelto en el escándalo del viaje del Lawfare a Lago Escondido, que destapó Página|12.
Sus primeros pasos fueron en falso: Aracre habló antes de asumir y propuso llevar a cabo una "flexibilización y modernización laboral". Tras las críticas del mundo gremial, dijo que era apenas "una opinión personal" y que el Presidente no creía que sea necesaria "una reforma laboral". Al momento de ser designado, un conjunto de abogados ambientalistas juntó firmas para rechazar su llegada al gobierno, al considerar que iba a ser "un predicador del agrótixo y el latifundio", por su pasado empresarial.
Pero la tormenta llegará tres meses después, el 19 de abril. Aracre renunció a su puesto en medio de una corrida cambiaria y de operaciones cruzadas en las que se lo mencionaba como posible reemplazo de Sergio Massa. Fue una prueba más de los cortocircuitos del Gobierno, porque mientra la portavoz del Gobierno deslizaba que no había ningún off desde la Rosada que le daba salida a Massa, los gobernadores le comentaban el rumor al propio ministro de Economía —y ahora candidato de Unión por la Patria— y distintos medios daban como primicia el "plan de desdoblamiento cambiario" que proponía el propio Arace. La salida fue confirmada, horas después del frenesí, por el propio Fernández.
La novela no quedó ahí. Dos semanas después, ya sin sus pertenencias en el despacho de Balcarce, el exCEO cargó contra Massa y Gabriela Cerruti en una entrevista radial. Ese mismo día, la Administración Nacional de Aduanas informaba que Syngenta, la firma agroquímica que tuvo como CEO a Aracre hasta diciembre, había sido imputada por "contrabando calificado" por un juez federal de Campana a partir de una denuncia por triangulación de importaciones con adulteración o falsificación de documentación al ingresar la mercadería al país.
La denuncia involucra operaciones de Syngenta entre 2018 y 2022, y fue formulada en 2022 por la propia Aduana, que conduce Guillermo Michel, miembro del equipo que arribó a la función junto a Sergio Massa.