Bajo la influencia de la literatura ciberpunk (y, en particular, de William Gibson, uno de los referentes de esa corriente de la ciencia ficción) y de las líricas tangueras, y sin haber perdido la esencia electrónica de Breakpop (disco debut con el que legitimó ese género de su autoría), Lesbiano le dio forma a un segundo disco que lo aproxima a un formato de canción en la que estrofas y estribillos tienen una presencia clara. Así, en El vuelo del águila midi el músico rosarino logra darle cabida a ráfagas de pop y rock, montadas siempre sobre secuencias de contagiosa rítmica electrónica. Acompañado por Julia (bajo y coros) y Rubí (sintetizadores y coros), Lesbiano volverá a poner en juego ese set esta noche, a las 23, en McNamara (Tucumán 1016), en un show compartido con los explosivos Daddy Rocks.

A siete años del lanzamiento de su primer disco solista, el guitarrista y compositor conocido como Lesbiano editó su nueva obra a través del sello independiente La Liga del Ruido. Distribuido por Central Eléctrica Discos, el trabajo es el resultado de una búsqueda compositiva que, intuitivamente, fue aproximándose a formatos algo más estructurados. "Fue una cosa que iba sintiendo. No podía esperar demasiado para volver al estribillo, era la onda en la que estaba en el momento, salió así, más pop, con dos estrofas y estribillo. El disco anterior puede ser más experimental", explica el compositor que, sin embargo, sí tenía una premisa clara al momento de crear: la de figurar en qué situación lo pondrían esas obras al momento de la interpretación.

"La realidad es que este disco también lo hice pensando un poco en visualizarme a mí tocándolo en vivo, ver mi cuerpo sobre el escenario --detalla a Rosario/12--. Fue el único pensamiento consciente que tuve a la hora de hacer la música, el movimiento del cuerpo arriba del escenario, cómo quisiera moverme cuando la música estuviera sonando. En el otro no me importaba absolutamente nada de todo eso. Este nuevo disco está pensado en relación al cuerpo, a la performance".

Fan de David Bowie, Lesbiano terminó de comprender que su música podía vincularse con una fuerte presencia escénica cuando, en el Niceto porteño, acudió a un shows de Atari Teenage Riot: "Los chabones no tocan prácticamente nada, su concepto es el de una banda de rap, donde no tocan en vivo, son tres MC (NdR: los maestros de ceremonias/cantantes del rap). Pensé que iba a ir a ver un karaoke, pero fui igual por una cuestión histórica, sin mucha expectativa, y fue uno de los mejores shows que vi en mi vida. Me di cuenta que la cuestión del rock no pasa por la instrumentación sino por la energía y el espíritu que hay arriba del escenario".

Marcadas por esa energía, las canciones de El vuelo del águila midi ganan peso también con sus líricas, allí donde Lesbiano traduce sus influencias de la literatura ciberpunk y del tango, género al que, asegura, relaciona con el punk: "Es una música de gente marginal, que vino de Europa, que perdió todo. Conecto con eso por cosas de mi pasado".