Con el título "Lecturas del presente. A 40 años del regreso de la Democracia", la edición 2023 de la Feria Internacional del Libro está lista para celebrar sus actividades. Con organización de Municipalidad de Rosario y Fundación El Libro, del 2 al 12 de agosto, el Centro Cultural Roberto Fontanarrosa (San Martín 1080) –lunes a viernes y domingo de 13 a 21, sábados de 10 a 22– reunirá mesas, presentaciones, homenajes, talleres, con más de 50 stands de librerías y editoriales locales y de todo el país. Todo con entrada libre y gratuita. Además, habrá visitas para escuelas, espacios para infancias, espectáculos, y tendrá su estreno la obra El Gran Circo Argentino del Programa Municipal de Teatro Norberto Campos en Teatro La Comedia.

La Feria se ha vuelto la actividad más relevante en la agenda cultural de la ciudad, la cantidad de días y la asistencia numerosa lo evidencia. En diálogo con Rosario/12, Federico Valentini, subsecretario de Industrias Culturales y Creativas, explica que “se trata de una búsqueda, a partir de los cruces entre las editoriales, los escritores y las escritoras locales, que tienen una grandísima participación en la Feria. También de la búsqueda de voces y referencias, como lo hicimos en la edición pasada con un discurso como el de Claudia Piñeiro, y como lo haremos en esta edición con Selva Almada dando el discurso inaugural. No solo es un evento convocante y masivo: pasaron más de 300 mil personas en la edición pasada; la Feria se ha convertido en un lugar de encuentro, debate y reflexión, sobre el estado actual de la producción literaria a nivel local y nacional. Creo que eso potencia al evento, sin ninguna duda, y lo llena de un contenido y significado necesarios para que los sectores de la ciudad, escritoras, escritores y editoriales, se apropien mucho más de la Feria”.

ederico Valentini, subsecretario de Industrias Culturales y Creativas de Rosario.

La escritora Selva Almada dará el discurso inaugural durante el acto de apertura, el miércoles próximo a las 18 en la Explanada del Centro Cultural Roberto Fontanarrosa. En síntesis, una festividad que bien viene ritualizar, más aún cuando los precios de los libros se han vuelto en gran medida prohibitivos. En este sentido, Valentini destacó: “Faltan políticas de Estado a nivel nacional, y además este ha sido un año muy particular en relación a los insumos del papel. Todo esto hace que se pierda de vista uno de los objetivos fundamentales: entender al libro como un derecho y como un sueño. Creo que todos aquellos que tuvimos la posibilidad, en nuestras casas, de que nos acerquen un libro, pudimos empezar a soñar otros destinos y otros rumbos. No hay escritores si no hay lectores. Por eso, creo que hay que repensar y poner en otro nivel de prioridad al libro. Faltan políticas públicas que resguarden la producción literaria. Más allá de esta feria en particular, el libro no puede ser preso de las condiciones que el mercado ofrece en relación a los valores del papel. En este sentido, la Feria también es una oportunidad: nosotros cubrimos el 70% del metro cuadrado de los stands para los editores y los libreros locales, hemos gestionado promociones con Banco Santa Fe y Banco Municipal, y estamos gestionando un combo con Tarjeta Naranja para que las escuelas primarias que concurran puedan comprarse un libro. A su vez, también les pedimos un esfuerzo a los editores y libreros, para que puedan ofrecer promociones en estos días, sabiendo también sobre las dificultades del año que transcurre y del costo que implica estar en la Feria, porque más allá de lo que el Estado dispone tienen que contratar personal y estar bastantes horas. Pero me parece que entre todos tenemos que hacer un esfuerzo, para que no se pierda el objetivo más primordial, que es acercar la literatura, la lectura, a todas las edades y momentos de la vida”.

La escritora Selva Almada dará el discuso inaugural. Foto: Enrique Garcia Medina.

Perico Pérez, director de Homo Sapiens y partícipe de todas las ediciones de la Feria del Libro, puede constatar muchas de las virtudes logradas: “La de este año sería la número 25; y cuando se volvió a hacer con este formato habían pasado 7 años de la última, realizada en el Patio de la Madera, también muy importante y de la que tengo un recuerdo hermoso, porque fue el último acto que tuvo el Negro Fontanarrosa, cuando su enfermedad ya estaba muy avanzada. Me acuerdo que él había cerrado la Feria y hacía mucho frío; se estaba despidiendo de su gente, del público, de los lectores. Por eso, que se haga en el Centro Cultural Roberto Fontanarrosa es también un homenaje a él. Por otro lado, la continuidad que se logró es fundamental, porque es lo que permite que año a año vaya creciendo y se incorporen nuevas actividades. Además, el Centro Cultural Fontanarrosa está ubicado en pleno centro de la ciudad y permite que se acerque un público que muchas veces no va a las librerías. Al ser la entrada libre y gratuita, se puede acceder más de una vez, y se agregan horarios interesantes, como el de la mañana del sábado, cuando hay mucha gente en el centro. Se puede ir en familia, hay actividades para los chicos, cada día hay entre 15 y 20 propuestas, es el evento cultural más importante que se realiza en el año en la ciudad”.

Sobre el precio elevado que hoy tienen los libros, el librero y editor comenta: “Pertenezco a la Cámara Argentina del Libro y soy miembro de su Consejo Directivo, y ante el aumento del precio del papel venimos dando una lucha sin muchos resultados. El año pasado, el aumento fue mayor al 230 por ciento y esto al editor más chico se le hace todavía más complicado. Lo que nos sale en realidad un libro no lo estamos trasladando al público, porque el precio sería todavía mayor; cada vez se hace más difícil editar novedades y sobre todo cantidades. Se están editando más libros, pero por demanda. Hay dos papeleras grandes, Celulosa y Ledesma, y son ellas las que ponen los precios. Este lunes acaba de aumentar un 20% el papel obra, con el que se realizan la mayoría de los libros. Por todo esto, el rol del Estado sería fundamental. Tuvimos reuniones en Buenos Aires con la Secretaría de Comercio, pero no hemos tenidos resultados. El Estado tiene que jugar un papel, o de lo contrario estas dos grandes empresas seguirán definiendo el precio como quieren. De esta manera, los editores quedamos indefensos. Pero quiero remarcar algo: la mayoría de las pequeñas y medianas editoriales tienen mejor precio de venta al público que las multinacionales”.

Como indica Pérez, la elección del Centro Cultural Roberto Fontanarrosa continúa ideal; de acuerdo con Valentini, “la voluntad de seguir haciendo la Feria en el Centro Cultural Fontanarrosa tiene que ver con que es un punto neurálgico de la ciudad, por donde todos, en algún momento de nuestros días, pasamos. Esto permite que muchos se acerquen a la Feria o a un libro por primera vez. Eso para nosotros ha sido prioritario. Y no se trata solo de recorrer la Feria, sino de poder ocupar el espacio público y de poder disfrutarlo, de sentarte con tu familia a compartir. Ocupar y compartir entre todas y todos el espacio público es la experiencia que mayor seguridad nos da; es algo que vemos cuando hacemos festivales, cuando hacemos Noche de Peatonales, cuando nos cuidamos utilizando el espacio público y llenándolo de actividades y de cultura; ese es nuestro objetivo y desafío”.

-¿Hay alguna demanda u observación por parte del sector librero local? -preguntó este diario a Valentini.

-Lo que notamos es la realidad misma, es un año difícil para muchos sectores. En este sentido, más que una demanda hay un deseo de participar en la Feria. De nuestro lado, está la necesidad de escuchar lo que nos están planteando. Cuando nos hemos reunido, les señalamos que no puede haber Feria del Libro sin ellos, son el actor fundamental para que esto suceda. Y este año decidimos acompañarlos aún más de lo que veníamos haciéndolo. Es esa nuestra responsabilidad y es lo que el Estado debe garantizar: la participación en primer lugar de los editores y las librerías locales, y también de escritores y escritoras locales. Convocamos a Selva Almada para la inauguración, también porque ella se define como una “una escritora de provincia”. Me parece que es importante que podamos mostrar una experiencia y Feria distintas en Rosario, con mucha de la rosarinidad que nos caracteriza, con muchos de nuestras escritoras y escritores presentes; tal vez sin esos nombres rimbombantes, que pueden estar en busca de una masividad mayor. Nosotros elegimos hacer una Feria con sentido, trabajamos para que nuestra programación sea una equilibrada, que ponga debates en juego, que ofrezca posibilidades gratuitas de formación. Es fundamental que eso exista. Hay varios talleres de escritura creativa, de crónica, literatura para principiantes; me parece que la Feria transita por todo lo que debe transitar: por lo comercial, que es sin duda necesario y hace a una Feria; por el diálogo y el intercambio; por la construcción y la formación, tanto de nuevos públicos como de aquellos que tienen el deseo de formarse y de tener un primer acercamiento con la escritura. Es un poco entender a la lectura como un derecho y rodearla con todas las herramientas que el Estado tiene para que no solo transiten 300 mil personas, sino que se construyan nuevos lectores en nuestra ciudad.

Perico Pérez acota: “Ojalá nos acompañen muchos lectores porque eso ayuda a que la Feria permanezca, pero también hay que lograr una fecha fija a través de una resolución que obligue al intendente de turno. Algo se hizo en su momento, pero habría que precisarlo más, y generar una comisión que permanezca, donde haya representantes de los libreros, editores, escritores, medios de comunicación, instituciones de la ciudad; de manera tal que pueda prepararse la Feria año tras año, tal como pasa con la de Buenos Aires”.

Entre las personalidades que visitarán la edición 2023 figuran Gabriela Cabezón Cámara, Alejandra Kamiya, Tute, Dolores Reyes, Osvaldo Baigorria, Margarita García Robayo, Dani Umpi, Claudia Masin, Pipo Lernoud, Alfredo Rosso, Alexandra Kohan, Juan José Becerra, Juan Pablo Meneses, Gael Policano Rossi (Astromostra), Javier Núñez, Leonardo Oyola, Iosi Havilio, y Julián López. 

También estarán presentes dos periodistas de Rosario/12: Horacio Vargas y Sonia Tessa. 

Habrá también homenajes. En este caso, con sendas mesas dedicadas a Quino –sábado 5 a las 17, con las presencias de Tute, Flor Balestra y Eduardo Risso–, Rosario Bléfari –domingo 6 a las 18, con Daiana Henderson, Claudia del Río, Vir Negri y Diego Trerotola–, y Elsa Bornemann –sábado 5 a las 16, con María Fernanda Maqueira, Beatriz Actis, Silvia Schujer y Yanina Zonni–. 

La programación completa puede consultarse en https://www.rosario.gob.ar/inicio/feria-internacional-del-libro