Desde Comodoro Rivadavia
Entusiasmados ante la perspectiva de lograr la revancha después del trago amargo en Córdoba capital, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta viajaron a Chubut con el objetivo de capitalizar lo que consideran que será el batacazo de Ignacio “Nacho” Torres en la provincia. La primera en llegar a Trelew, terruño de Torres y base política de la oposición, fue Bullrich, quien llegó -apenas cerraron las urnas- acompañada de su compañero de fórmula Luis Petri y su armador en el interior, Damián Arabia. Los vientos que vienen haciendo estragos en la provincia demoraron su llegada, sin embargo arribó mucho antes que su competidor en la elección presidencial, atenta a sumar al jóven senador PRO a su mapa de aliados en el caso de que sea electo gobernador.
Cerca de las ocho de la noche aterrizó Horacio Rodríguez Larreta, acompañado por el secretario de Proyección Federal de la Ciudad, Eduardo Macchiaveli, su hermano Augusto y su jefe de prensa Christian Cohelo. El objetivo es claro: los dirigentes nacionales de JxC buscan recrear la foto fallida de la semana pasada en Córdoba, cuando Rodrigo De Loredo perdió la elección, y utilizar el batacazo en Chubut como impulso previo a las PASO del 13 de agosto. Ya vienen de celebrar los batacazos en San Luis y San Juan - ambos capitalizados principalmente por Larreta - y ahora buscan sumar a Chubut a la lista de provincias peronistas que fueron ganadas por JxC.
En el bunker de JxC en Trelew el clima es de victoria, sin embargo a más de 400 kilómetros, en el bunker del peronismo en Comodoro Rivadavia advierten que las tendencias que le llegan de Comodoro y Madryn - las dos ciudades claves de la elección - les da por arriba a “Arriba Chubut”. Son horas - minutos - de incertidumbre y ambos bandos coinciden en que será una elección que se definirá solo por unos votos.