El ex titular del Sindicato de Peones de Taxi de Rosario, Horacio Boix, fue condenado a tres años de prisión -que cumplirá en arresto dominciliario- en la causa por la que fue acusado de instigar balaceras y defraudar al gremio. Además, la sentencia incluye diez años de inhabilitación para ejercer actividades sindicales. La investigación dio cuenta de una conexión con la estructura de Los Monos.

El juez Rafael Coria homologó el procedimiento abreviado presentado por la Fiscalía y aceptado por la defensa y el condenando Horacio Boix, de 73 años, a la pena de 3 años de prisión efectiva bajo la modalidad de domiciliaria, por los delitos de administración fraudulenta, extorsión en carácter de instigador (dos hechos en tentativa) y abuso de arma en carácter de instigador (seis hechos). También se lo penó con inhabilitación especial por el término de 10 años para el desempeño de la actividad gremial y se le impide contacto con la sede del Sindicato de Peones de Taxi y los miembros de la comisión directiva.

 

Los fiscales David Carizza y Matías Edery de la Agencia de Criminalidad Organizada le atribuyeron que en su carácter de secretario general del sindicato perjudicó a los afiliados, procurando para sí o personas cercanas un "lucro indebido de 8 millones de pesos", que fueron obtenidos por el imputado durante el año 2018 hasta el mes de agosto de 2019 inclusive. En función de ser su cargo, "tuvo amplio poder de disposición sobre un patrimonio, que le era ajeno y que manejó y administró como propio", expresa la acusación. 

También se le achacó que en su rol de exsecretario (dado que había sido expulsado de la conducción por una denuncia de malversación de fondos) se vinculó con la estructura criminal dirigida por Ariel Máximo Cantero, a los fines de recuperar la conducción del Sindicato, intentando de esta forma retornar a la conducción de la entidad gremial mediante amenazas y hechos de abuso de armas hacia personas de la nueva comisión directiva.