Temprano y en el Palacio Municipal, el intendente Pablo Javkin recibió ayer al concejal y único adversario en su carrera a la reelección, Juan Monteverde. No hubo fotos porque el encuentro no iba a tener difusión, y solo los animaba la idea de acordar una campaña de aquí al 10 de setiembre sin golpes bajos. Pero cerca del jefe municipal lo hicieron saber y fue la nota política del día. Al menos, para Rosario.

Quienes pugnan por el próximo gobierno local se reunieron a instancias primero de las mujeres más cercanas en la campaña de cada uno: la presidenta del Concejo María Eugenia Schmuck –que también va por su reelección– y la concejala de Ciudad Futura, también en la misma carrera, Caren Tepp.

"Había conversado esto con María Eugenia, y la idea era reunirse ellos y nosotras, dado que ya lo habíamos hecho en la interna con Roberto Sukerman, y habíamos acordado esto precisamente: hacer una campaña limpia, sin agravios, con argumentos, en contraste con lo que demostró la interna del frente Unidos", señaló Tepp ante la consulta de este diario. 

El encuentro se dio ayer a primera hora de la mañana y sin prensa. Tanto de un lado como del otro coincidieron en la explicación. "Sirvió para seguir la buena relación que tienen, no pegarse abajo de la cintura, transitar una campaña respetuosa, seria, en el marco de la relación personal que tienen hace años y no tirarla por la borda", resumió un portavoz del Ejecutivo municipal. 

El acuerdo le sirve al intendente para neutralizar ataques duros a los flancos débiles de su gestión municipal. Han comprobado, además, en Unidos para Cambiar Santa Fe, que la estrategia agresiva de Carolina Losada fracasó. Y al candidato opositor también le rinde el encuentro porque demuestra actitud de diálogo y construcción política, al mismo nivel que lo declama el oficialismo. Ambos habían insinuado esta armonía el año pasado, en ocasión del OK para el plan urbanizador en Nuevo Alberdi, el territorio original de Giros, movimiento social precedente de Ciudad Futura. Y a lo largo de la gestión, el oficialismo pudo encontrar acuerdos parlamentarios en el Concejo con el bloque presidido por Monteverde. Algo que desde otros espacios de oposición le han criticado.

"También han tenido diferencias políticas y han sido honestos en planteárselas, pero siempre con altura y respeto. Lo demostró la convivencia en el Concejo, con debate frontal y honesto, dentro de los términos lógicos. Lo que se quiere es no perder ese clima en la campaña", agregó la fuente municipal.

"Conversamos con el respeto imprescindible para elevar el debate y la construcción política. Eso, sin dejar de discutir el modelo de ciudad que nosotros proponemos ante lo que hoy es Rosario", añadió Tepp.

La expectativa, también, es que el acuerdo de las cabezas se irradie y se acate en derredor de cada una. Para el caso del candidato de Juntos Avancemos que en este turno electoral jugó la interna del peronismo y la ganó, no cayeron bien lecturas descalificadoras que la prensa porteña hizo de su postulación al día siguiente de las PASO. 

"Hay algunos que son más papistas que el Papa y este acuerdo tiene que marcar límites a eso. Primero nos acusaban de ser funcionales al oficialismo, nos criticaban por dar gobernabilidad en el Concejo, y ahora como somos la única competencia nos quieren mostrar como desestabilizadores. Entonces, cada uno debe hacerse responsable de lo que dice su gente", planteó un observador desde el partido que armó la lista Rosario sin Miedo.