San Telmo es un clásico de domingo. La feria, el mercado y los shows callejeros son las principales atracciones a la que asisten decenas de vecinos y turistas, de distintos barrios y países. Pero ese plan de fin de semana puede arruinarse en cuestión de minutos, cuando la Policía porteña insiste con su prioridad de ser duro con los artistas e impedir que hagan música en la calle: el show de Dama Manchada fue suspendido cuando más de una decena de efectivos se apersonó en el cruce de Defensa e Independencia, en el corazón del barrio, ordenaron a las dos músicas que dejen de tocar.
"Las chicas estaban laburando y la Policía fue a violentarlas", relató a Página/12 uno de los vecinos que presenciaron tanto el show tanguero como la represión policial. Los transeúntes intentaron evitar que los efectivos suspendan el recital, pero no hubo caso: la orden fue impedir que sigan tocando. Por eso llegaron dieciséis policías al lugar -cuando las músicas era, apenas, dos- y, para garantizar aquella disposición del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, la fuerza de seguridad porteña hasta decidió intentar quitar las herramientas de trabajo a las dos artistas.