El mensaje llegó al país oculto en el doble fondo de un bolso de cuero, pequeño, que viajó como equipaje de mano. El mensajero no se despegó de él ni un segundo de las largas horas que duró el vuelo de Iberia. Confiesa que fumó nerviosamente, un Ducados tras otro, hasta aterrizar. Ya en el hall de Ezeiza, dos compañeros, grandotes, bigotudos, prolijamente engominados, lo reconocieron y lo escoltaron hasta un Torino blanco cero kilómetro. El chofer manejó todo el trayecto mirando más por el espejo retrovisor que hacia adelante, temeroso de que lo siguieran. Al bajar de la General Paz, cambiaron rápido de auto. Por su seguridad, le vendaron los ojos en el tramo final del recorrido.
Cuando recuperó la visión, estaba en el comedor de una casa, convertido en microcine. Una docena de sillas dispuestas alrededor de la pantalla blanca, el proyector enchufado y los compañeros, ansiosos. Con celeridad, el experto en comunicaciones montó la cinta sobre los carreteles, la insertó en el Super 8 y en pocos segundos apareció la imagen del Viejo, desde su despacho en Puerta de Hierro.
El audio era claro y contundente. “Algunos compañeros me preguntan: General, por qué tenemos que ir a votar en las PASO? Simple, porque si no van a votar, viene la derecha y se queda con nuestros derechos, que tanto nos costó conquistar. Vayan a votar”.
La historia precedente es ficticia, pero va mejor con el contenido del video que posteó la cuenta de Twitter @elegirenpba que la realidad, mucho menos romántica: que el video lo hicieron unos veinteañeros con herramientas de edición gratuitas, probablemente desde su smartphone.
Los comandos de campaña del gobernador Axel Kicillof y el ministro Sergio Massa coinciden en otorgarle prioridad a este punto. La afluencia masiva a las urnas favorece, sostienen, a Unión por la Patria. Siempre es forzado comparar elecciones legislativas con ejecutivas, pero el antecedente de 2021 no es para subestimar. El anteaño pasado, casi dos millones de bonaerenses se quedaron en sus casas en las PASO, que en vez de agosto fueron en septiembre, para que el clima más benigno impidiera la proliferación del coronavirus, todavía amenazante.
Si se compara 2021 con 2019, queda claro que quienes decidieron no concurrir a las urnas eran mayormente votantes peronistas desencantados con la marcha del gobierno. Eso explica que, con una cantidad de votos casi igual a la de 2019, JxC en vez de perder haya ganado el primer turno, en esa ocasión 37 a 33. Muchos de esos votantes modificaron su conducta y asistieron a las urnas en las generales, lo que explica la remontada del oficialismo y el virtual empate: 39 a 38 en porcentaje.
Sin embargo, tanto por el magro desempeño electoral como por sus disputas internas cada vez más expuestas, desde entonces el gobierno de Alberto Fernández, sin mayorías para llevar adelante una agenda legislativa propia, quedó a la defensiva. Ese es el escenario que los estrategas de ambos candidatos, Antoni Gutiérrez Rubí en el caso de Sergio Massa e Ignacio Ramírez en el de Kicillof, pretenden evitar.
Con otro tono, pero idéntico objetivo, las redes oficiales de UxP postearon el viernes un video de 41 segundos, “La Patria está en tus manos”, que se viralizó rápidamente.
El lema es complementario de “derecha o derechos” y está íntimamente relacionado con el sinceramiento que los principales candidatos de la coalición opositora han adoptado como estrategia de campaña. En el caso de Patricia Bullrich y Néstor Grindetti, la “unificación del tipo de cambio”, que no es otra cosa que una devaluación, y la militarización del espacio público para reprimir las protestas derivadas de esa transferencia de ingresos de abajo hacia arriba. En el caso de Rodríguez Larreta, la puesta en marcha de esa misma receta en Jujuy, el pago chico de su compañero de fórmula, Gerardo Morales.
Desafección política
Las estadísticas confirman que quienes aún no tienen decidido si concurrir a las urnas o no, alrededor del 30 por ciento del padrón, son mayormente menores de 30 años, de sectores medios bajos y bajos. Es decir, el electorado tradicionalmente peronista.
La participación será, indican los analistas, uno de los factores decisivos a la hora de definir la elección del domingo próximo. Más allá de los sondeos que formulan la pregunta de manera explícita, las alarmas se encendieron a partir de algunas elecciones provinciales en las que la concurrencia estuvo por debajo de la media histórica. Santa Fe y Chaco registraron abstenciones récord del 37 por ciento, un escalón más abajo estuvieron Mendoza (34) y Córdoba (32).