El gobernador Axel Kicillof cierra este miércoles por la tarde el primer tramo de la campaña, de cara a las elecciones PASO del domingo 13, con un acto peronista tradicional en el partido de Merlo, al oeste del conurbano. La cita es a las 15 en el predio El Remanso, perteneciente al club Deportivo Merlo.
Kicillof cerrará campaña por partida doble. El jueves será parte, en el teatro Argentino, del cierre de la campaña nacional que protagoniza el actual ministro de economía y que tendrá formato de conversatorio. Alejado de la liturgia política tradicional, el candidato a presidente dialogará con representantes de distintos sectores acerca de sus propuestas de gobierno.
En el cierre distrital, Kicillof encabezará el acto acto a la manera tradicional, tal como lo solicitaron los intendentes del espacio, con todos los componentes de la liturgia peronista: movilización masiva, trompetas, bombos, banderas, globos... y los infaltables choripanes. Sergio Massa también será de la partida.
Esa decisión se tomó en base a las recomendaciones del consultor catalán Ántoni Gutiérrez Rubí, que prioriza la pequeña escala: pequeños actos, pequeñas reuniones, conversaciones íntimas, para reforzar características como la accesibilidad, la simpleza y la humanidad del candidato.
Todos contentos
En las últimas semanas, el mensaje unificado de ambos comandos fue “vayan casa por casa y pídanle a la gente que vaya a votar”. Una fuente muy cercana al gobernador asegura que “esa es una enorme tarea militante, que se hace cuerpo a cuerpo, y la militancia necesita periódicamente de encuentros y actos como éste, para recargar energía. Son una inyección de vitaminas”. La decisión les permite mostrar a los intendentes su apoyo, mensurable en la capacidad de movilización: el juego que más les gusta.
Una de las incógnitas que nadie se atreve a develar todavía es la posible presencia, tanto en Merlo como en La Plata, de la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner. Su aparición pública más reciente y resonante fue hace exactamente un mes, en Salliqueló, en ocasión de la inauguración del gasoducto Néstor Kirchner.
La elección de Merlo como sede tiene un innegable componente cabulero: el 8 de agosto de 2019, hace cuatro años y un día, el entonces candidato cerró ahí la campaña previa a las PASO. Le fue tan bien —derrotó a la “orgullosamente bonaerense” María Eugenia Vidal por 52 puntos contra 34—, que transitó el tiempo que faltaba hasta octubre como virtual gobernador electo, confiado en repetir en octubre.
Merlo integra la primera sección electoral y tiene, según el censo 2022, 580 mil habitantes. Limita con los partidos de Moreno, Marcos Paz, Ituzaingó, La Matanza y General Rodríguez que, juntos, conforman una región muy favorable al peronismo.
El candidato a intendente del oficialismo es Gustavo “el Tano” Menédez, que fue electo por primera vez en 2015, tras vencer en las PASO al histórico Raúl Othacehé, con quien arrastra una rivalidad de más de dos décadas.
Othacehé, electo por primera vez en 1991, fue el hombre de Duhalde en el distrito. Como tantos, acordó posteriormente con Néstor Kirchner y luego con Massa, cuando su estrella ascendente amagaba con eclipsar la del kirchnerismo. Volvió al FPV para 2015, cuando la apuesta por el Frente Renovador no parecía una opción de poder real, pero esa vez no le alcanzó para impedir que el Tano compitiera.
Menéndez fue reelecto en 2019, en 2021 pidió licencia y fue reemplazado por su hermana Karina. Ahora va por su tercer mandato. Entre sus retadores, figura el propio Othacehé: a los 77 años, irá con boleta corta, bajo el sello "Crecer".