River quedó eliminado de la Copa Libertadores tras perder 9-8 en la tanda de penales con Internacional de Brasil, después de caer 2-1 en los 90 minutos, en su visita al estadio Beira-Río, en el encuentro revancha de los octavos de final.
Con el tanto sobre la hora de Robert Rojas, River llevó el encuentro hasta la tanda de penales, pero el propio paraguayo no pudo convertir su ejecución desde los doce pasos, y Sergio Rochet convirtió para dejar afuera al conjunto de Núñez.
Como curiosidad, el árbitro Andrés Matonte cambió de lugar la definición por penales cuando ambos equipos fallaron, debido a que se había levantado un pedazo del césped.
Inter fue mucho más que River, con el dominio de la pelota desde el inicio del encuentro y encerró al equipo argentino en su propio campo, en donde Armani tuvo mucho trabajo para sacar varios remates que estaban por terminar dentro del arco.
Los dirigidos por Martín Demichelis estuvieron muy imprecisos, con pases fallidos y poco nivel en ataque, ya que Beltrán quedó muy solo. La lesión de Enzo Pérez le hizo cambiar el esquema e Ignacio Fernández entró para ayudar en ofensiva.
Para la segunda etapa, Inter salió con las mismas ganas pero le costó 25 minutos poder convertir, y el tanto llegó de la mano de un ex River: Gabriel Mercado, quien la clavó arriba, inatajable para Armani.
A poco de finalizar el partido, Patrick metió un pelotazo desde una acción detenida que nadie conectó, ni los defensores de River ni los atacantes de Inter pero que venció a Armani para el 2-0 y la eliminación momentánea del equipo argentino.
En los últimos minutos del final, un gran centro de Palavecino dejó a dos jugadores de River de frente al gol: Beltrán y Rojas. Este último la conectó con suspenso y metió el descuento para ir a los penales.
En la tanda de penales, River se vio complicado tras el penal de Solari, ya que el delantero tocó dos veces la pelota cuando se resbaló por el estado del campo de juego y su definición quedó nula, no obstante se ilusionó tras el remate en el poste de De Pena.