• Cómo llegar: varias aerolíneas ofrecen vuelos directos entre Ezeiza y Recife. Aunque la tarifa sea un poco más elevada es preferible comprar un vuelo que evite paradas en otros aeropuertos, sobre todo el de San Pablo, enorme por ser el “hub” número uno de Brasil, ya que puede hacer demasiado engorroso en tiempo el viaje.
  • Dónde alojarse: Porto de Galinhas cuenta con hospedajes meramente habitacionales en las pocas cuadras de su centro comercial. A unos minutos del poblado, comienza el desfile de resorts u hoteles cinco estrellas con un menú de servicios que cuenta en el esmerado servicio de entrenamientos para niños como la “marca” turística del lugar.
  • Otros consejos: el cambio entre dólares y reales conviene hacerlo en la city porteña. La tarifa de intercambio, ya sea en Recife o en las playas de Ipojuca, suele ser estar diezmada en relación a la cotización real de la moneda nacional.