El juez Edgardo Laurenci, de la Sala I del Tribunal de Juicio de Orán, condenó a Mauricio Fabián Zambrano (28) a 8 años de prisión efectiva, como "autor penalmente responsable del delito de homicidio simple con dolo eventual" porque el 24 de abril de 2022 conducía ebrio y chocó a la atleta Irene Virginia Peronja.
El magistrado ordenó que Zambrano sea trasladado a la Unidad Carcelaria 3 de Orán, donde cumplirá su condena.
El domingo 24 de abril del año pasado Virgnia Peronja, que tenía 28 años, estaba corriendo al costado de la ruta nacional 50, a la altura del acueducto entre la localidad de Hipólito Yrigoyen y Orán, cuando fue embestida por el automóvil que conducía Zambrano, quien manejaba de forma zigzagueante, a alta velocidad y sin tomar en cuenta la advertencia de otros conductores que le habían hecho cambio de luces y tocado bocina.
Después del choque el joven, que fue gendarme, intentó escapar pero fue detenido pro policías que circulaban por la misma ruta y que precisamente venían tratando de que cesara de conducir de la manera en que lo venía haciendo. El análisis de alcoholemia arrojó resultado positivo, con 1.84 gramos de alcohol por litro en sangre.
Estos datos fueron puestos de resalto en el alegato de la fiscala fiscala Claudia Carreras, quien pidió que Zambrano fuera condenado a 11 años de prisión. En cambio, la defensa, a cargo del abogado Orfeo Maggio, solicitó que fuera absuelto por el beneficio de la duda y, si se lo condenaba, que fuera por homicidio culposo, con lo que hubiera tenido una pena menor.
En el debate Zambrano reconoció que efectivamente había ingerido bebidas alcohólicas. Además, reconoció que la mañana del sábado 23 de abril había consumido marihuana. Sin embargo, sobre el choque específicamente, trató de responsabilizar a la víctima, afirmando que ella se le cruzaba y que para tratar de esquivarla volanteó varias veces.
Pero lo contradijeron los testimonios de los policías que lo detuvieron, y que venían en otro vehículo detrás de Zambrano. Estos policías dijeron que vieron que el auto avanzaba en zigzag, que intentaron rebasarlo pero no lo consiguieron, que le tocaron varias veces la bocina y le hicieron juego de luces pero Zambrano no hacía caso a sus advertencias y en esas circunstancias en la subida del acueducto vieron a una mujer que corría y trataba de esquivar el auto de Zambrano que había bajado a la banquina y había vuelto a subir al asfalto. Incluso los policías aseguraron que daba la impresión de que el automóvil perseguía a la joven, hasta que la chocó.
Virginia Peronja era una atleta reconocida en Orán y su muerte provocó conmoción en Orán. Ni bien se conocieron las características del siniestro vial en que la joven perdió la vida se sucedieron expresiones de dolor y de reclamo de que el conductor fuera condenado.