"Es un orgullo patrio saber que somos dignos representantes de Colombia y de Sudamérica. Ahora somos el único equipo que está representando a todo el continente americano y eso es placentero para nuestras jugadoras y para nosotros como cuerpo técnico", declaró Nelson Abadía, entrenador cafetero, luego de vencer 1-0 a Jamaica y conseguir por primera vez en la historia del país la clasificación a los cuartos de final de la Copa del Mundo de fútbol femenino, en los que enfrentará a Inglaterra este sábado desde las 7.30.
La selección colombiana creció mucho en el último tiempo y la evolución puede notarse en la Copa América (que hasta el 2010 se denominaba Campeonato Sudamericano). En su primera participación, en 1998, y en la edición de 2006 se quedó afuera en la fase de grupos, mientras que en las restantes fue protagonista: en 2018 fue cuarta, en 2003 tercera y en 2010, 2014 y 2022 consiguió el segundo puesto, y solo fue superada por la poderosa Brasil.
Con los subcampeonatos obtenidos en el torneo continental consiguió las clasificaciones a los Mundiales de 2011, 2015 y 2023, y en cada uno fue superando su rendimiento. En su primera actuación, en Alemania 2011, no logró pasar de la fase de grupos, pero empató 0-0 contra Corea del Norte y obtuvo su primer punto mundialista. En la segunda presentación, en Canadá 2015, ganó su primer partido en este torneo ante Francia y, sumado al empate que consiguió frente a México, obtuvo la clasificación, como el mejor tercero, a octavos de final. En Australia-Nueva Zelanda 2023 está volviendo a hacer historia, ya que quedó primera en su grupo, en el que venció 2-1 y dejó afuera a Alemania (segundas del ranking FIFA y campeonas en 2003 y 2007), y se clasificó, por primera vez, a los cuartos de final.
Además, las selecciones de base también están teniendo un buen presente, ya que en 2022 fueron subcampeonas del Mundial Femenino sub-17 y del Sudamericano Femenino sub-20, y hay jugadoras de la talla de Linda Caicedo, que con 18 años es delantera del Real Madrid y está haciendo un gran Mundial, por lo que Colombia puede ilusionarse con un futuro prometedor.
Sin embargo, en los clubes la situación no es la misma. Luego de reclamos por parte de las jugadoras, y de que la Conmebol anunciara en 2016 que a partir de 2019 los clubes deberían tener un primer equipo femenino y otro formativo para poder participar de la Copa Libertadores masculina, en 2017 se creó la Liga Profesional Femenina de Fútbol. Y, si bien convocó a más de 33.000 personas en la primera final, lo que fue un récord mundial en ese momento para un partido de fútbol femenino a nivel clubes, luego de siete ediciones se siguen realizando torneos cortos, de entre dos y cinco meses, que no les permiten a muchas jugadoras dedicarse exclusivamente al fútbol.
En este sentido, Kena Romero, delantera de Millonarios, declaró para la Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales (ACOLFUTPRO): "Es triste que a pesar de que el fútbol femenino ha crecido muchísimo en Colombia, y de que la selección consiga buenos resultados en todas las categorías, no recibamos apoyo ni una liga más larga para que tengamos una situación económica mejor y más estable. Pero hay que seguir trabajando y esforzándonos para demostrar que vale la pena y merecemos el respeto de la continuidad de la liga".
Para 2023, por ejemplo, la División Mayor del Fútbol Colombiano (DIMAYOR) había prometido que se disputarían dos torneos durante el año, pero, nuevamente, no se cumplió y su presidente, Fernando Jaramillo, alegó que el calendario —que incluye la Copa Mundial que se está disputando y la Copa Libertadores que se desarrollará del 5 al 21 de octubre en Colombia— dificultó su concreción.
En cuanto al máximo torneo continental, a diferencia de la rama masculina, que se juega desde 1960, tiene una duración de aproximadamente un año, 47 participantes y se disputa en distintos países, en la femenina la primera edición fue en 2009, juegan 16 equipos, dura menos de un mes y se juega en un solo país. De las 14 ediciones que se llevaron a cabo, 11 las ganaron equipos brasileños y, a pesar de no tener una liga local consolidada, en 2018 Atlético Huila se convirtió en el primer y único equipo colombiano en coronarse campeón. Los otros tres que jugaron una final, pero fueron subcampeones, fueron Formas Íntimas (2013), América de Cali (2020) y Santa Fe (2021), lo que sigue demostrando el alza en el nivel colombiano en el último tiempo.
Ese buen desempeño de las cafeteras es el que se está viendo en Australia-Nueva Zelanda, que tiene a la mitad de las convocadas disputando el torneo local. Sobre este presente, Abadía aseguró: "Nosotros no veníamos a la Copa Mundial a cumplir por cumplir. Nosotros queremos escribir historia, porque la historia es mejor escribirla a que te la cuenten. Trajimos a las mejores 23 jugadoras de nuestro país y sabemos de la solidez mental y deportiva que ellas tienen. Este grupo de futbolistas está consiguiendo cosas importantes, que van a trascender, y están haciendo crecer el fútbol femenino en nuestro país".