Los dólares financieros y el informal arrancaron el mes de las PASO con fuertes subas y también se aceleró el ritmo de devaluación del dólar oficial, un escenario que si bien sacude al pequeño inversor promedio era esperable por los grandes jugadores, empresarios y otros financistas. PáginaI12 conversó con Rodrigo Alvarez, director de la consultora Rodrigo Álvarez y Asociados, y con Martín Vauthier, director de Anker Latinoamérica, para saber qué puede pasar con el dólar oficial y los paralelos luego de las elecciones del próximo domingo y cuál puede ser la reacción del gobierno según el resultado electoral.  

“Como se espera que el próximo gobierno aplique un plan de estabilización rápidamente, y ese plan traiga aparejado una devaluación del dólar oficial para achicar la brecha, en las proximas semanas veremos una dinámica en donde el BCRA perderá más reservas –pues los exportadores demorarán la liquidación y los importadores aumentarán su demanda”, sostiene Rodrigo Álvarez. “El gobierno convalidará una suba del oficial en línea con lo observado en los últimos días: por encima de la inflación, cercano al 10 por ciento mensual”, agrega.

En tanto, desde Anker Latinoamérica señalaron que es difícil avecinar donde se ubicarán las cotizaciones “porque es un momento de mucha incertidumbre ya que tenemos dos eventos que en el corto plazo impactarán sobre los mercados: por un lado las PASO, que van a definir los candidatos y aportarán información sobre cómo será la dinámica en octubre, y en segundo lugar que no se conoce todavía la letra chica del acuerdo con el Fondo”. Martín Vauthier, director de la consultora, indica que “la aceleración del crawling-peg del tipo de cambio oficial en lo que va de agosto (pasó del 7,2 por ciento mensual promedio en julio a la zona del 13 por ciento en agosto) luce como parte de lo que se acordó con el Fondo, pero desconocemos si esto se mantendrá o si es insuficiente para el organismo”. Recuerda además que en su última revisión en abril, el FMI habló de un atraso cambiario real de entre 10 y 25 por ciento.

En lo que va de agosto, “las subas en los dólares alternativos no fueron homogéneas porque la intervención oficial se concentró principalmente en el segmento del dólar Mep: estimamos que en lo que va de agosto el BCRA usó unos 200 millones de dólares de sus reservas para intervenir en el mercado de bonos y moderar la brecha”, destaca un informe de la consultora Equilibra. El BCRA “ya lleva utilizados unos 2.000 millones de dólares desde que comenzó con esta operatoria a fines de abril pasado”, agregan. Y que “la evidencia reciente muestra que los picos se registran en momentos de fuerte tensión financiera-cambiaria y suelen retomar a sus niveles promedio más bien por una rápida baja del CCL que por una suba considerable del Mep”.

Para Rodrigo Alvárez “la evolución de los dólares paralelos dependará del resultado de las elecciones, son cotizaciones que están más propensas a las expectativas y para los mercados sería más positivo que gane la oposición.” Aún así advierte que “de acá a diciembre, los tipo de cambio libres se van a ajustar (también) a la inflación y el oficial se ubicará por encima.” Para el especialista “existen dos elementos de fondos, dado que siempre cerca de las elecciones se genera una sobre-demanda de dólares, aunque en esta ocasión se justifica mucho menos que en otras elecciones porque el dólar libre ya está muy alto”.

Vauthier coincide, aunque aclara que “los dólares paralelos están en niveles elevados respecto de los promedios históricos para Argentina, pero en el corto plazo siempre muestran mayor volatilidad y eso puede asociarse a la expectativa respecto del resultado electoral: especialmente sobre los guarismos entre el resultado que obtenga el oficialismo versus la oposición.”

“Si el resultado del domingo está en línea al esperado por el mercado, podría llegar a descomprimir las presiones sobre las cotizaciones financieras y el dólar informal, volviendo a situar al CCL por debajo de su tendencia”, remarca la consultora Equilibra. “En cambio, si el resultado va en sentido contrario de las expectativas, podríamos ver un tipo de cambio financiero acercándose a niveles de sobre-reacción previos”, agregan.

Por último, al ser consultados sobre el escenario macroeconómico, desde Anker sostuvieron que “la macro no favorece al gobierno en términos electorales: el BCRA tiene un balance muy deteriorado con reservas netas negativas en la zona de 10.000 millones de dólares y estamos en una situación donde cualquier medida que se toma para reducir el ritmo de pérdida de reservas es inflacionaria, como la restricción a importaciones vía impuesto PAÍS o dólares especiales para la exportación o aceleración del crawling-peg”.