“Desde que salió la orden, los compañeros comenzamos tareas de acondicionamiento y ahora más de 25 personas trabajan en el lugar”, relató Luis Paz, abogado de Milagro Sala. Estos 25 cooperativistas de la Tupac Amaru, que se encuentran sin trabajo desde el 10 de diciembre de 2016, unieron sus fuerzas para poner en condiciones la vivienda que fue dispuesta para reubicar a Sala.
Gracias al trabajo colaborativo la instalación eléctrica ya está terminada, según precisaron fuentes de la Tupac Amaru. Aunque todavía no hay fecha exacta de finalización (está pendiente aun la instalación de agua, por ejemplo), los cooperativistas se mueven a contrarreloj, “para que la suelten cuanto antes, para que no tengan excusas”. Algunos de los integrantes de la Tupac mostraron en un video, que se puede ver online en el canal La García, cómo van los preparativos: “Vinimos a ayudar porque no queremos que se pierda más tiempo. Estamos poniendo la casa en condiciones para que ya no tengan excusas. Acá nos encontramos con todo destrozado. Se habían llevado hasta los enchufes. La intención de mandarla acá era que no pudiera tener nada de nada. Milagro es una mujer hecha de abajo que se animó a levantar la voz. Así es posible entender por qué la metieron presa. Si los que estuvieron en el gobierno los últimos treinta años hubieran hecho lo que ella hizo...”
La casa había sido saqueada tras la detención de la dirigente social en el penal de Alto Comedero. Este inmueble del barrio La Ciénaga, en las afueras de Jujuy, en el que Gerardo Morales pretendía que Milagro Sala cumpliera la prisión domiciliaria no tenía ni puertas ni ventanas. A la vista había cables pelados, una cocina sin artefactos, un baño sin inodoro.
Tras la resolución de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, se dispuso la prisión domiciliaria para la líder de la Tupac Amaru, detenida arbitrariamente desde enero de 2016. Si bien la decisión de los magistrados que llevan las causas por las cuales Sala está detenida -Gastón Mercau y Pullen Llermano- cumple sólo parcialmente con la cautelar de la CIDH, tal como lo expresó su presidente, Francisco Eguiguren, la defensa de la diputada del Parlasur señaló que es urgente que se concrete el traslado puesto que la integridad física de Milagro en el penal no está garantizada. La respuesta por parte de los jueces jujeños al fallo de la CIDH además de parcial fue tardía. Según lo dispuesto por el organismo, Sala debería haber estado fuera del penal de Alto Comedero a más tardar el viernes 11 de agosto. Recién el viernes 18 por la noche se dio a conocer que Pullen Llermano había otorgado la prisión domiciliaria. “El Estado argentino es el garante del cumplimiento de los tratados internacionales y esta responsabilidad cae en la figura del presidente de la Nación”, recordó el abogado Luis Paz.