Las fuertes lluvias dejaron al menos 50 muertos en las últimas 24 horas en el norte de la India, sumido en el caos por el bloqueo de carreteras y deslizamientos de tierra, mientras las autoridades instan a las personas a quedarse en casa hasta que mejore el pronóstico.
En el norteño estado de Himachal Pradesh, "más de 50 personas han perdido la vida en las últimas 24 horas, y más de 20 personas siguen atrapadas, el número de muertos también puede aumentar", dijo a los medios el jefe de gobierno de esa región, Sukhvinder Singh Sukhu.
Una decena de las muertes se reportó en la ciudad de Shimla, tras el derrumbe de un templo hindú a causa de las precipitaciones.
Otras siete personas fallecieron cuando una avalancha de agua arrasó de manera repentina una carretera en el distrito de Solan, también en Himachal Pradesh.
Las fuertes lluvias, que ocasionaron numerosos deslizamientos de tierra y el cierre de más de 700 carreteras para evitar desastres, obligaron a las autoridades a suspender las clases y a reforzar la asistencia en las zonas más vulnerables del Estado.
La alerta roja por incesantes lluvias también persiste sobre el vecino estado de Uttarakhand, donde las corrientes de agua arrastraron edificios y desbordaron caudales de ríos, según imágenes difundidas por el canal de noticias NDTV.
El Departamento Meteorológico de la India (IMD, en inglés) pronosticó que los dos estados norteños, los más afectados desde que empezó la temporada de lluvias monzónicas en el país asiático, experimentarán lluvias "intensas o muy intensas" a lo largo de la jornada de hoy.
Las intensas lluvias causan cada año importantes pérdidas humanas y materiales en los países del sur de Asia, especialmente durante el periodo del monzón, entre mayo y septiembre.