El batacazo de Javier Milei en gran parte de Argentina ha llevado a la dirigencia oficialista y cambiemita a sacar la calculadora y comenzar a hacer cuentas en el Congreso de la Nación. Porque si los resultados de las PASO se repiten, Milei pasará a tener 41 diputades y 8 senadores a partir del 11 de diciembre. Es decir que, gane o no gane la presidencia, el conservador ultraliberal pasará a convertirse en un actor fundamental en la arena parlamentaria.
Ninguna de las dos grandes coaliciones, Unión por la Patria y Juntos por el Cambio, tendrán mayoría propia en las dos cámaras, por lo que si alguna de las dos fuerzas terminase ocupando el sillón de Rivadavia se verá forzada a negociar con Milei para sacar sus leyes. Una perspectiva que entusiasma a Patricia Bullrich, preocupa a UxP y que, al revés, sería un desafío para el propio Milei en el caso de ganar las presidenciales y darse de frente con la realidad de que, para prender fuego el Banco Central, primero necesita conseguir los votos.
Tanto Unión por la Patria —rebranding del Frente de Todos— como Juntos por el Cambio sufrieron una dura derrota el domingo electoral. De repetirse el resultado de las elecciones, ambas coaliciones verían sus bancadas reducidas en la Cámara de Diputados. El oficialismo, que actualmente es la primera minoría, pone en juego 68 de sus 118 bancas y, de obtener el mismo resultado en octubre, terminaría quedándose con solo 92 diputades. JxC, mientras tanto, quedaría mejor posicionado pero seguiría estando lejos del quórum (y lejos de las bancas que hoy mismo tiene): pasaría de tener 116 diputades a tener 107.
La ganadora de la interna cambiemita, Patricia Bullrich, especulaba desde un principio con que el panorama legislativo podía arrojar números similares (aunque nunca pensó que JxC sacaría un porcentaje tan bajo en las PASO). Una de las diferencias que tenía con Horacio Rodríguez Larreta era, en efecto, que se imaginaba sosteniendo una alianza estratégica y esporádica con Javier Milei para poder impulsar las reformas económicas que tiene en carpeta. Esto es: flexibilización laboral, apertura comercial, ajuste de la inversión estatal, baja de impuestos y reforma previsional. Con 107 diputades propios y 41 de Milei, Bullrich tendría un escenario legislativo propicio para impulsar sus políticas de ajuste.
Un escenario similar se repite en el Senado, en donde Javier Milei logró colar, por primera vez, senadores "libertarios". En total, de repetirse la victoria en varias de las provincias que les tocaba renovar a sus senadores, La Libertad Avanza pasaría a tener 8 senadores. En una cámara de 72 legisladores y con un oficialismo que, si bien sumaría senadores —pasaría de tener 31 a tener 33—, se encuentra lejos de la mayoría, el voto de les senadores libertarios sería clave para la aprobación de cada iniciativa. Un panorama que, nuevamente, podría ser beneficioso para Bullrich de lograr llegar a un acuerdo, pero más difícil para el peronismo.
La situación cambiaría radicalmente si fuera Milei el que terminara ganando las presidenciales. Con sólo una cuarentena de diputades y 9 senadores, el economista de ultraderecha deberá ingeniársela para tejer alianzas con distintos sectores de JxC, el peronismo y las fuerzas provinciales si quiere avanzar con sus propuestas de gobierno. La privatización de empresas públicas (como Aerolíneas Argentinas o Télam), la eliminación del Banco Central, la privatización del sistema de Salud, la derogación de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, la reforma laboral: todas estas iniciativas, que forman parte del programa de gobierno de Milei, deberán enfrentar la prueba del Congreso. Y si bien hay algunas leyes que podrían contar con el acompañamiento de un sector de JxC, hay otras que ya vienen registrando el rechazo de una parte importante de la coalición cambiemita (fundamentalmente en las filas del radicalismo y la Coalición Cívica).
Quién es quién en las listas de Milei
Entre les candidates a diputades y senadores de Javier Milei que podrían ingresar a partir del 11 de diciembre hay periodistas, influencers, empresarios, y más de un apellido icónico de la política tradicional. En la Provincia de Buenos Aires, por ejemplo, encabeza la lista de Diputados Alberto "Bertie" Benegas Lynch, hijo del economista Benegas Lycnh al que Milei considera un "prócer liberal". De repetirse el resultado de las PASO, ingresarían a la Cámara baja figuras tan variopintas como la periodista Marcela Pagano, el exdirigente de UATRE, Pablo Ansaloni, y una influencer y cosplayer que se encarga de la "imagen" de Milei llamada Lila Lemoine. Entraría también, por parte de CABA, una economista que, hasta hace unos meses, ejercía como directora de Loma Negra y de Bodegas Bianchi, llamada Diana Mondino.
Por más "anti casta" que se presente, Milei tiene en sus listas a más de un dirigente de la política tradicional. Dos de sus principales referentes en el interior son Martín Menem, sobrino del expresidente riojano, y Ricardo Bussi, hijo del genocida tucumano Antonio Domingo Bussi. Bussi fue, además, denunciado por abuso sexual cuando era legislador provincial. En La Rioja, donde La Libertad Avanza arrasó en las elecciones, Milei podría meter también a dos senadores, uno de los cuales, Juan Carlos Pagotto, ha oficiado como abogado defensor de personas acusados por delitos de lesa humanidad.
