Científicos de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos (NASA) advirtieron sobre las consecuencias climáticas del fenómeno de El Niño, señalando que podría exacerbar los registros térmicos y llevar al 2023 a convertirse en el año más caluroso jamás registrado en la Tierra. Incluso, el año 2024 podría superar las cifras de calor de este año con consecuencias devastadoras.
Los gases de efecto invernadero producidos por la actividad humana fueron señalados como el principal motor del calentamiento.
Los primeros en advertir sobre el fenómeno fueron los expertos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), quienes manifestaron su creciente preocupación por el impresionante calentamiento del Océano Pacífico. Todos coinciden en que las consecuencias pueden ser alarmantes.
"Los océanos más cálidos blanquean los corales, matan la vida marina, aumentan el nivel del mar y hacen que el océano sea menos eficiente a la hora de absorber la contaminación que calienta el planeta: cuanto más se calienten los océanos, más se calentará el planeta", sostuvieron desde NOAA.
"Existe la posibilidad de que el planeta supere el límite de calentamiento de 1.5°C, lo que podría desencadenar una serie de problemas, como sequías, tormentas e inundaciones. De hecho, en varias regiones del mundo, incluyendo partes de América del Norte y del Sur, África del Norte y la Península Antártica, las temperaturas ya registraron un aumento de 4°C por encima del promedio", informaron los expertos de la NASA.
El cambio climático, principal causa
Carlos del Castillo, jefe del laboratorio de ecología oceánica de la NASA, subrayó la interconexión entre los océanos y el clima global, señalando que lo que sucede en los océanos tiene un impacto directo en todo el planeta.
Sin embargo, a pesar de las advertencias sobre El Niño, la agencia también resaltó que las emisiones de origen humano siguen siendo la causa principal de estos cambios climáticos. Durante las últimas cuatro décadas, las actividades humanas contribuyeron significativamente al calentamiento global.
Además del impacto en las temperaturas globales, se prevé que el próximo episodio de El Niño, que podría ocurrir entre febrero y abril de 2024, también pueda potenciar la propagación de enfermedades.
Madeleine Thomson, responsable de los impactos climáticos de la organización caritativa Wellcome Trust, destacó que anteriores episodios de El Niño llevaron a la aparición de diversas enfermedades de transmisión vectorial y otras enfermedades infecciosas en las regiones tropicales, que en general son las más afectadas por este fenómeno.
La "era de la ebullición global"
La NASA no es la única organización que prevé temperaturas récord. El secretario general de la ONU, António Guterres, lanzó hace pocas semanas un mensaje de advertencia sobre los peligros del cambio climático, subrayando que "la era del calentamiento global ha terminado, y hemos entrado en la de la ebullición global".
"El cambio climático está aquí, es terrorífico, y esto es solo el comienzo", aseguró el portugués, quien añadió que pese a la negativa situación, de la que "los humanos son los culpables".
"Todavía es posible limitar el ascenso de las temperaturas globales por debajo de los 1,5 grados y evitar lo peor del cambio climático", aunque para ello, subrayó, "deben acelerarse las acciones".
El máximo responsable de Naciones Unidas apeló en este sentido a cumplir los compromisos de emisiones netas cero, en el caso de las naciones desarrolladas antes de 2040 y para 2050 en las economías en desarrollo.
"Todos los actores deben unirse para una justa y equitativa transición de los combustibles fósiles a las renovables, mientras detenemos la expansión del petróleo y el gas, así como la financiación de nuevos proyectos de estas fuentes de energía y del carbón", afirmó Guterres.
La influencia de El Niño en la Argentina
"Entre la primavera y el verano, se espera que haya una transición a El Niño, y es esperable un aumento tanto en la frecuencia como en la intensidad de las lluvias en las áreas central y norte del país", explicó a Página 12, Cindy Fernández, meteoróloga del Servicio Meteorológico Nacional.
La experta hizo hincapié en la experiencia y el conocimiento que hay sobre este fenómeno: "Sabemos que con El Niño presente durante la primavera y el verano, la posibilidad de episodios de lluvias extremas, donde se acumula una gran cantidad de milímetros en poco tiempo, son mucho más comunes que en otros años sin El Niño”, resaltó Fernández.
En referencia a la variabilidad térmica, desde el organismo señalaron que el fenómeno de El Niño produce temperaturas mínimas más altas y máximas más bajas.