Año bravo para los Ejecutivos en Santa Fe. Además del cimbronazo electoral, los vaivenes de la economía nacional impactan en las cuentas fiscales al interior de la provincia. Y aunque todavía faltan cuatro largos meses para liquidar el período, ya hay cola en la Casa Gris de intendentes y presidentes comunales pidiendo plata a cuenta del Fondo de Obras Menores para poder con lo mínimo: pagar los sueldos de sus empleados.

Así lo reveló ayer el secretario de Municipios y Comunas, José Luis Freire: 49 de los 365 distritos santafesinos pidieron autorización a esa repartición en el Gobierno provincial para disponer de al menos la mitad de las partidas correspondientes al fondeo que depara la Ley 12.385 y que originalmente debe destinarse a la compra de equipamientos y realización de obrs públicas. Pero acá, el pedido es para usarlo para gastos corrientes. Ergo, eso refiere sencillamente al pago de sueldos de los trabajadores municipales.

El pedido de estos 49 intendentes y presidentes comunales representa en total unos 339 millones de pesos. El FOM previsto para este año totaliza unos $6.300 millones.

La cifra no es superlativa aún, y eso se debe a que la mayoría de los municipios que pidieron esta dispensa son pequeños. Sin embargo, Freire confirmó anoche a Rosario/12 que hay un centenar de intendentes más terminando el trámite administrativo para solicitar lo mismo.

El detalle de esta gestión en un síntoma grave de la coyuntura económica: generalmente, los intendentes suelen pedir esta clase de dispensas en tiempos de vacas flacas y recaudación magra. Pero suele ocurrir hacia fin de año, cuando en cada distrito deben afrontar vencimientos y, además, sueldos y medio aguinaldo. Y entonces la Legislatura despacha una ley rápida para dar el OK. El problema es que ahora estos pedidos se hicieron en agosto. 

"La Legislatura aprobó la ley correspondiente y hace 15 días que estamos habilitados a proceder con esta autorización. Es que la situación es muy compleja en algunas localidades", comprendió Freire.

El funcionario provincial comentó que la pauta salarial de incremento al 21% acordado en julio pasado para los municipales incidió fuerte en las cuentas de las comunas chicas. Lo mismo sucede con el aumento de precios en insumos clave para los gobiernos locales, tales como el combustible y el cemento, en caso de los que tienen obras en marcha.

"A pesar de que la Provincia ha hecho aportes importantes, el plan Incluir, más financiamiento educativo, amplió el porcentaje de coparticipación del Inmobiliario con los municipios, no alcanza. Hay baja en la recaudación, también la coparticipación nacional se resintió por la sequía, y por la sequía misma hay localidades en el centro y norte de Santa Fe que no pudieron cobrar la tasa rural, que es su principal ingreso", expuso el secretario de Municipios y Comunas. 

"Además –agregó el funcionario– muchos se encuentran con que por estos días después de la devaluación, los proveedores no les presentan precio de insumos. Ni hablar con servicios apalancados en el dólar, tales como el mantenimiento de las redes de agua potable. Realmente, será un año muy largo, y más complejo aún en medio de elecciones", observó.

Freire afirmó que las autorizaciones para estos primeros 49 municipios ya están en marcha para que sus intendentes pueden afrontar el pago de los sueldos de agosto, mientras avanza la segunda tanda, mucho mayor, aún en trámite.