"Perder tus cosas por el agua es algo trágico.Lo que pasa es que los pobres pierden todo cada vez que llueve. Una los abraza y llora con ellos, porque son los compañeros de toda la vida. La sensación de estos días fue el decir 'otra vez', es un agotamiento mental y anímico terrible."

La que habla es Paula De Rose, vecina del Barrio Cementerio de La Plata, militante del Movimiento Evita y candidata a concejal en la lista de Unión por la Patria. "Paulita" —como la llama Julio Alak—, es una referente para sus compañeros y compañeras de los barrios populares platenses, junto a quienes puso el cuerpo (esta vez en el agua), una vez más, para dar respuesta a los vecinos que se vieron perjudicados por la lluvia y la inundación del pasado jueves. El centro de evacuados que organizó el Movimiento Evita tuvo sede en el Club Chacarita Platense, en el barrio Altos de San Lorenzo, al que acudieron más de 600 personas evacuadas provenientes de de Puente de Fierro, Barrio Evita, Planeadores, Kilómetro 52, Abasto, Etcheverry, Lisandro Olmos, Romero, y Los Hornos

De Rose le cuenta a BuenosAires/12: "La gente estaba muy asustada porque la lluvia no paraba y tampoco drenaba el agua, los vecinos estuvieron totalmente bajo el agua. A todos los registramos y le dimos respuesta con mercadería, ropa y demás. Las mismas compañeras del movimiento, que estaban inundadas, estuvieron ahí desde el minuto cero clasificando la ropa, haciendo ollas y buscando mercadería. En el club funciona el jardín comunitario y, con lo que teníamos ahí, empezamos a rescatar cosas. Servimos mate cocido con tortafritas, la gente de las panaderías empezó a mandar bizcochuelos, facturas y demás, cambiamos a los nenes y los pusimos calentitos al lado de la estufa".

La candidata se lamenta: "Pudimos entregar solo 120 colchones, lo cual es una vergüenza. Tuvimos que mover cielo y tierra para que manden algunos colchones, que igualmente nunca alcanza, porque si mandas 500, se van a necesitar 501." De Rose destaca que "todo lo que llegaba al club se bajaba, se clasificaba y se entregaba". Y evoca: "Estábamos desbordados de gente pero dimos respuesta e hicimos todo ordenados. A mí me buscaban los vecinos porque saben que podemos responder, pero están tan cansados, que nos da miedo el hecho de no poder responder y que queden desahuciados."

La falta de obras de infreaestructura hizo muy lento el drenaje del agua.

También denuncia la nula presencia del Estado municipal que encabeza Julio Garro: "No estuvo en absoluto la municipalidad. No hicieron nada. Pusieron un centro de evacuados en el Club Fomento de Los Hornos y lo agotaron en dos minutos, le decían a la gente que vaya a buscar 'adonde esté el Movimiento Evita' y pidan ahí', porque ellos no tenían. También subieron fotos de colchones y cosas que todavía no tenían porque no había llegado." En La Plata se vivieron momentos de zozobra, tanto que "en Villa Elvira y San Lorenzo era para rescatar a la gente en botes y tampoco lo hicieron. No pidieron refuerzos, la municipalidad directamente no intervino. Y encima salieron a decir que no había evacuados y que estaba todo bajo control, lo cual es terrible porque nosotros, en ese mismo momento, teníamos más de 500".

"Garro no puede llevar ocho años de cero infraestructura. Se necesitan obras, no puede ser que en los lugares que estaban para absorber el agua se hagan construcciones sin planificar. Hacés un barrio pero no forestás, no limpiás, es un desastre", dice De Rose y agrega: "Se necesita planificación y que ejecuten el presupuesto real de obras. La gente va a estar dos semanas sin salir de la casa, porque no va a absorber todo. Los arroyos y las zanjas están desbordados, ni siquiera pasó el control de plagas, no limpiaron y no hay respuestas de ningún tipo."

La candidata denuncia que hasta media tarde del viernes, "no había respuesta de nadie, porque nadie salía a dar la cara". A su vez, hace hincapié en que "los medios nacionales no cubrieron nada porque las inundaciones fueron en los barrios y no le importan a nadie". Y amplía: "TN decía 'qué gran diferencia con el 2 de abril, miren La Plata todo lo que llovió y aun no se inundó ni pasó nada', pero mostraban un auto que andaba por el centro. A partir del desborde total y la exposición empezaron a mostrar la realidad. Ni siquiera la gente del centro sabía lo que pasaba."

Con enojo señala: "A diferencia de otras oportunidades, en esta ocasión noté que todos reconocieron que esto tiene que ver con Julio Garro, porque fue la inundación de los barrios pobres. Y eso es la no limpieza de los sumideros, la no limpieza de los arroyos, la no recolección de basura y ni una sola obra". Y agrega: "Hay miles de countries nuevos en la ciudad, pero todos los otros barrios están mal ubicados y mal ordenados. La gente lo entendió y se dio cuenta", asegura De Rose.

Con el sol del sábado y el cese del agua, el centro del Club Chacarita Platense cerró sus puertas. "Si está abierto la demanda no termina, porque además del agua hay hambre. Las compañeras deben volver a sus casas a recomponerlas. En cuanto a los necesitados, haremos un registro y llamaremos a los casos más críticos", dice y concluye: "Da bronca porque dependés de todo el mundo y no podés resolverlo como uno quisiera, pero los pasos a seguir son así, de a uno, llamando y respondiendo en la medida que se pueda."