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Desde Washington
La propuesta que el ministro de Economía, Sergio Massa, trae en sus valijas para presentar al FMI en el encuentro que mantendrá este miércoles en la capital estadounidense, en materia de política cambiaria, es la de mantener congelado el valor del dólar oficial hasta mediados de noviembre. Recién a partir de entonces, una vez que se conozca el aumento de precios minoristas (el IPC del Indec) del mes de octubre, se volvería al régimen de minicorrecciones diarias, a un ritmo de "la inflación mensual de octubre, menos un punto", confía una fuente del equipo económico, pero sin cargarle al valor del dólar la inflación que se haya verificado en los meses de agosto y septiembre. Mientras tanto, se confía en que las intervenciones oficiales sobre los mercados de dólares financieros (MEP y contado con liqui) permitan ir estabilizando su precio y la brecha cambiaria respecto del oficial.
Este miércoles, se descuenta que el Fondo Monetario aprobará el desembolso por 7500 millones de dólares ya comprometido, cuya disponibilidad sería inmediata. De ese total, luego de descontados los fondos a reponer a quienes adelantaron "créditos puentes" para pagar anteriores vencimientos con el FMI y los retirados de la cuenta del swap con China, quedarían unos 3400 millones de dólares en las reservas internacionales. Sumados a los 1700 millones ya acumulados en lo que va de agosto (hasta este lunes) por compras de divisas del Banco Central en el mercado, le daría a la autoridad monetaria una capacidad de intervención importante para lograr la estabilización de los dólares financieros.
"Lo deseable sería tener una brecha del 60 por ciento" respecto al dólar oficial de 350 pesos (a nivel mayorista), comentó una fuente del Palacio de Hacienda. Eso daría un valor para los dólares financieros de 560 pesos. "Pero creemos más razonable esperar en esta etapa poder ir a una brecha del 82 por ciento", agregó. Llevado a cifras, un dólar financiero de 630 pesos, mientras el oficial se mantenga congelado en 350.
Hasta minutos antes de viajar, el ministro de Economía mantuvo reuniones con su equipo, y ya al filo de iniciar el vuelo con el presidente de la Nación, Alberto Fernández, para definir los términos de los anuncios que, a partir de este lunes, se irán haciendo respecto de las compensaciones a los sectores perjudicados por la devaluación del 22 por ciento del 14 de agosto.
Jubilados y pensionados, trabajadores formales y de la economía social, beneficiarios de programas sociales y asignaciones, y también las pymes e integrantes de la economía social, esperan ansiosos esos anuncios. Pero no todos se harán en simultáneo. El ciclo de anuncios se inicia este jueves, no bien se produzca el arribo de Massa a Buenos Aires (de regreso de su actual misión en Washington), pero continuarán el viernes y a lo largo de la próxima semana.
"Son aproximadamente diez medidas, que se irán anunciando a un ritmo de dos por día, aproximadamente", confió una fuente que no quiso dejar trascender cuáles serán las primeras. Pero se sabe que el aumento salarial de suma fija para trabajadores registrados y el refuerzo a jubilados y pensionados pelean por la primera fila en la grilla de partida. Los funcionarios a cargo de la tarea específica, Kelly Olmos (ministra de Trabajo) y Fernanda Raverta (titular de Anses) ya habrían completado su parte de la tarea. La decisión también cuenta ya con la aprobación de los responsables de mantener el equilibrio fiscal. De este tema, el de los costos de las medidas, también se hablará este miércoles en Washington con Kristalina Georgieva.
