El balance comercial de julio fue deficitario por 649 millones de dólares, según informó el Indec este martes. El rojo se contrajo respecto del promedio de los últimos tres meses, de 1.000 millones de dólares, pero todavía no alcanza para cambiar de signo.
Las exportaciones totalizaron 6.060 millones de dólares, acusando una nueva caída interanual de un 22,4 por ciento, debido al impacto de la sequía sobre los despachos de productos primarios y manufacturas de origen agrario. En tanto, las importaciones sumaron 6.709 millones de dólares en el mes, acentuando el ritmo de caída al 19,1 por ciento interanual.
Los despachos
En julio se perdieron 1.745 millones de dólares en materia de exportaciones respecto a julio de 2022, una parte fue atribuible al efecto de los precios (799 millones) pero predominó el correspondiente a las cantidades (946 millones).
El deterioro de las exportaciones se debió principalmente a la merma en el despacho de granos y oleaginosas, lo cual redundó en una caída del 35,6 por ciento de las ventas de productos primarios medidas en cantidades, pero a esto se sumó una baja en los precios de exportación en este rubro de 8,9 por ciento interanual.
En cuanto a las manufacturas de origen agropecuario el deterioro por precios fue superior al de cantidades: 15,6 y 12,4 por ciento interanual respectivamente. En suma se exportó menos maíz, trigo, soja y sus derivados (aceite, harina y pellets). Menos sorgo, aceite de girasol y carne pero más cebada.
Las ventas de manufacturas de origen industrial también sufrieron sendas caídas, en precios y cantidades, pero más modestas: 2,5 y 0,8 por ciento interanual respectivamente. La merma se debió fundamentalmente a menores ventas de vehículos de navegación aérea, marítima y fluvial y de productos químicos y conexos, en cambio las ventas de vehículos terrestres se mantuvieron en sendero positivo.
Por último, las exportaciones de combustibles y energía aumentaron 96,5 por ciento medidas en volúmenes, mientras los precios disminuyeron 37,8 por ciento. El incremento se debió fundamentalmente al petróleo crudo que Argentina exporta a Estados Unidos, Brasil, Chile, Países Bajos, Bolivia.
Las compras
Las importaciones se achicaron en el séptimo mes del año un total de 1.580 millones de dólares. La principal causa es la baja de las compras de combustibles y energía, que sumaron 927 millones de dólares en julio de 2023 versus 2.361 millones en julio de 2022. Medidas en volúmenes, las importaciones de CyE retrocedieron 55,5 por ciento interanual y por precios 11,2 por ciento. Por otro lado, sobresalió el impacto que tuvieron las menores adquisiciones de vehículos automotores, que cayeron 78,5 por ciento interanual en julio.
Por el lado de las importaciones vinculadas con el circuito industrial, se observó una tenue recuperación en términos de cantidades: 6,9 por ciento aumentaron las compras de bienes de capital; 5,3 las de bienes intermedios y 7,7 las de piezas y accesorios todas ellas medidas en volúmenes; mientras por el lado de los precios cayeron 4,6 por ciento interanual en el caso de los bienes de capital, 7,1 los bienes intermedios y 0,4 las piezas y accesorios. Las compras de bienes de consumo cayeron 5,3 por ciento en cantidades y los precios apenas subieron 0,3.
El costo de los fletes fue de 83,8 dólares por tonelada en julio de 2023, 28,8 por ciento inferior al monto en igual período de 2022 (117,7 dólares por tonelada) y 9,7 por ciento superior al de julio de 2021 (76,4 dólares por tonelada).
En lo que va del año el saldo comercial suma un rojo de 5.142 millones de dólares. Se destacan las caídas de exportaciones dirigidas a India, Estados Unidos y China, en tanto la merma en las importaciones golpeó especialmente a China y Estados Unidos.