La FIFA anunció ayer la apertura de un procedimiento disciplinario contra el presidente de la Real Federación Española de fútbol (RFEF), Luis Rubiales, por el beso no consentido a la futbolista Jennifer Hermoso durante la ceremonia de premiación del Mundial Femenino, que se adjudicó España. Cerca de las 20 horas en España, trascendió que ya acorralado y sin apoyo el dirigente presentará este viernes su renuncia.

El anuncio de la FIFA sobre el procedimiento disciplinario al presidente de la RFEF, terminó de inclinar la balanza hacia la dimisión del dirigente. Según el ente rector del fútbol mundial, el español podría haber violado los artículos 13.1 y 13.2 del Código Disciplinario, que advierte sobre "conductas ofensivas y violaciones de los principios del juego limpio"; mientras que el segundo estipula que "podrán imponerse medidas disciplinarias" a quienes asuman actitudes que "desprestigien al fútbol o a la FIFA", aclaró la FIFA en un comunicado.

"La Comisión Disciplinaria de la FIFA no ofrecerá más información sobre este procedimiento disciplinario hasta la adopción de una decisión final sobre el mismo", aclaró la máxima entidad.

Rubiales mantuvo una conducta repudiable durante toda la jornada de la final España-Inglaterra en el estadio de Sydney, lo que motivó el rechazo de diferentes actores del fútbol y la política, entre ellos, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.

En primera instancia, el dirigente festejó el gol que le dio la consagración a España tomándose los genitales en el palco de honor de la cancha, que compartió junto a la reina Letizia. Ya en la ceremonia de premiación, besó en la boca a Hermoso y luego cargó sobre sus hombros a Athenea Del Castillo, en otra actitud abusiva contra las jugadoras.

España se consagró campeona mundial de la Copa Femenina de la FIFA Australia y Nueva Zelanda 2023 por primera vez en su historia, luego de ganarle por 1 a 0 en la final a Inglaterra, el último domingo, en Sydney.