La gobernadora del estado de Nueva York, Kathy Hochul, envió este jueves una carta al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidiendo que el Gobierno federal "cumpla su obligación" y preste ayuda "urgente" en la crisis desatada por la llegada masiva de inmigrantes en los últimos meses.
Hochul, sometida a críticas por su aparente inacción mientras la ciudad de Nueva York afronta la crisis -más de 100.0000 inmigrantes llegados en año y medio- levanta ahora el tono en una misiva formal a la Casa Blanca con exigencias: que aceleren los permisos de trabajo para los solicitantes de asilo, una mayor asistencia financiera y reembolso de ciertos gastos, además espacios que sirvan como albergues.
Entre otras cosas, propuso acciones ejecutivas como dar el Estatus temporal de protección (TPS) específicamente a solicitantes de Venezuela y permisos por motivos humanitarios a los de otros países.
También agradeció los fondos federales de 145 millones de dólares recibidos, pero destacó que se quedan cortos cuando los altos costes en los que están incurriendo el estado y la ciudad hacen proyectar un gasto de 4.500 millones el año que viene, y 12.000 millones en total hasta 2025, mientras baja la recaudación fiscal.
Un gasto mensual de 22 millones
Solo en el despliegue de operativos de la Guardia Nacional para la respuesta humanitaria, el estado está gastando 22 millones mensuales, que según Hochul debería asumir el Gobierno federal.
La llegada de más de 100.000 inmigrantes en el último año sigue a un ritmo "alto e imparable", de cientos y hasta miles por semana, dijo, por lo que "el Gobierno federal debe trabajar con la ciudad y el estado (de Nueva York) en la gestión de esta crisis humanitaria", ya que hay una "necesidad urgente", exhortó.
Según ella, la administración estatal y la local, aseguró que se están "desplegando todos los recursos y personal disponibles" pero matizó que "sin ninguna capacidad o responsabilidad para abordar la causa del flujo de migrantes, los neoyorquinos no pueden entonces cargar con los costes".
"No puedo pedir a los neoyorquinos pagar por lo que fundamentalmente es responsabilidad federal, e insto al Gobierno federal a tomar acción rápida y significativa hoy para cumplir su obligación con el estado de Nueva York", sentenció.
La presión de la gobernadora a Washington llega cuando parecen estar bajando su popularidad y la del alcalde, Eric Adams, por su respuesta en la crisis migratoria, un tema en el que la Alcaldía ha redoblado esfuerzos de comunicación esta semana para intentar transmitir el trabajo que se está haciendo.
Dos organizaciones involucradas en la ayuda a los inmigrantes, The Legal Aid Society y coalition for the Homeless, respaldaron la llamada de Hochul a Biden, al tiempo que denunciaron el "bloqueo político en Washington que obstaculiza una solución nacional".
Pero insistieron en la responsabilidad de la propia Hochul: "Se necesita urgentemente más ayuda del estado para evitar que la gente se quede languideciendo en las calles, ya que las provisiones constitucionales en las que se basa el derecho a refugio se aplican al estado igual que a la ciudad".