La Agencia Federal de Inteligencia (AFI) espió a familiares que buscaban saber qué había pasado con el submarino San Juan de la Armada Argentina después de que el buque perdiera todo contacto en noviembre de 2017, en pleno gobierno de Cambiemos. Esa afirmación fue corroborada por los tribunales. Sin embargo, el expresidente Mauricio Macri y los mandamases de la exSIDE macrista están sobreseídos en esa causa. El tema está a estudio de la Cámara Federal de Casación Penal, que el próximo miércoles celebrará una audiencia para revisar la situación procesal del líder del PRO y del resto de los once imputados.
La causa espera en el primer piso de Comodoro Py desde hace más de un año. En julio del año pasado, la Cámara Federal porteña –integrada por Mariano Llorens, Pablo Bertuzzi y Leopoldo Bruglia– sobreseyó a Macri y al resto de los imputados porque entendió que la actividad que desplegó la AFI sobre las familias estaba justificada. Según los camaristas, había riesgo para la seguridad interior y la seguridad del entonces Presidente. Evidentemente la exSIDE debe haber evaluado que el peligro era demasiado elevado porque incluso espió misas que se hicieron y fotografió a niños.
La revisión de ese fallo –que fue objetado tanto por la fiscalía como por las querellas– quedó en manos de la Sala II de Casación, que para este caso está conformada por Guillermo Yacobucci, Ángela Ledesma y Mariano Borinsky. Parte de la demora estuvo relacionada con una serie de recusaciones que se presentaron. A Ledesma quisieron correrla los imputados porque fue crítica de sus colegas que mantuvieron encuentros con Macri mientras ejercía la presidencia. A Carlos Mahiques lo apartaron sus pares después de una respuesta destemplada a la abogada querellante Valeria Carreras, que pedía que lo separaran del expediente por su viaje a Lago Escondido y al Mundial de Qatar. Macri logró sacarse de encima a un camarista incómodo como Alejandro Slokar porque el juez no interviene en otra causa que está relacionada indirectamente, la que orbita alrededor del falso abogado Marcelo Sebastián D’Alessio.
Para el miércoles está previsto que expongan oralmente algunas de las partes. Arrancará el abogado querellante Luis Tagliapietra; continuará Carreras y cerrará Mariano Bergés, que representa a las familias de otro busque –El Repunte– que también fueron espiadas por la AFI. Por las defensas hablarán Pablo Lanusse, abogado de Macri, y María Laura Gnas, que representa a Eduardo Winkler, exdirector de Reunión de la AFI. Lo harán de manera remota. Por el momento, se prevé que el cierre será de Paula Litvachky, la directora ejecutiva del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) –que interviene como amicus curiae (amigo del tribunal) en la causa. El CELS señaló en una presentación ante Casación que el fallo de la Cámara Federal funciona como una carta blanca para los servicios de inteligencia.
“Como abogada pretendo que esta causa de espionaje a víctimas sea una bisagra en lugar de un mal precedente”, dice Carreras. “Pretendo que como sociedad entendamos el alcance de nuestros derechos y conozcamos su contracara siniestra, cuando es el Estado el que los vulnera al meterse en la vida y la intimidad de quienes considera peligrosos o enemigos”, sostiene la abogada.
“Más allá de los nombres que están involucrados –como Macri o Gustavo Arribas– espero que este sobreseimiento inmoral sea revocado. De lo contrario, mis representadas –que son familiares de la tripulación del ARA San Juan– pasarían de víctimas a victimarias en potencia, y los ciudadanos quedaríamos en estado de sospecha a merced del poder de turno para hacer del contrato social, las garantías constitucionales y los principios del Estado de derecho tierra fértil para sembrar el terrorismo de Estado otra vez”, advierte Carreras.
La investigación sobre el espionaje a las familias de los submarinistas se inició en septiembre de 2020 con una denuncia de la entonces interventora en la AFI, Cristina Caamaño, después de hallar documentos que daban cuenta de que la base Mar del Plata había vigilado a quienes reclamaban respuestas sobre el ARA San Juan. En diciembre de 2021, el juez federal Martín Bava procesó a Macri. A los pocos días, le sacaron todos los expedientes sobre el espionaje macrista que tramitaban en el juzgado de Dolores, donde él subroga desde que Alejo Ramos Padilla asumió como juez federal de La Plata.