El gobierno de la provincia de Santa Fe confirmó que no abonará el bono de 60 mil pesos a los empleados estatales. La suma fija fue anunciada por el ministro de Economía, Sergio Massa, dentro de un paquete de medidas que busca reforzar los salarios frente a la devaluación pos electoral y el proceso inflacionario. Desde el Ministerio de Trabajo provincial explicaron que el monto va a ser absorbido por los aumentos contemplados en las paritarias. En el gremio de los docentes públicos se mostraron cautos ante la decisión, pero adelantaron que si la inflación supera al aumento de provincia, pedirán que se active la cláusula gatillo, prevista recién para octubre.
El fin de semana, el gobierno nacional dispuso una serie de medidas con intención de preservar el poder adquisitivo de los salarios. Una de ellas es el pago de una suma fija de 60 mil pesos, dirigida a trabajadores con salarios que no superen los 400 mil pesos mensuales, a pagarse en dos meses por única vez y a cuenta de futuras paritarias. Este martes, el ministro de Trabajo de la provincia, Juan Manuel Pusineri, confirmó que la provincia no pagará ese bono a los trabajadores estatales.
“Lo que empezamos a liquidar a partir de septiembre es el aumento paritario que convenimos con los distintos sectores de la administración. Ese aumento paritario tiene, además de un importante aumento en el mes de agosto, una cláusula de revisión automática que va a permitir que los salarios, en el peor de los escenarios, no pierdan con la inflación”, explicó en declaraciones a Radio Nacional Rosario.
Semanas atrás, los gremios estatales acordaron con el gobierno provincial un aumento del 51% escalonado hasta fin de año, a pagarse un 25% en agosto, un 7% en septiembre y en octubre, y un 6% en noviembre y en diciembre. La paritaria también contempla cláusulas de actualización por inflación a revisarse en octubre y diciembre.
Para el funcionario, el “buen acuerdo” logrado con los gremios de la administración central permitirá que los trabajadores perciban, a partir de septiembre, una recomposición mayor que la prevista por el bono anunciado desde el gobierno nacional. Pero, para el caso que la inflación sea más alta de lo que ya se presume, Pusineri recordó que los gremios cuentan con las revisiones correspondientes, como garantía de que los salarios no van a perder poder adquisitivo.
“Eso nos va a permitir cubrir todo lo que es la inflación de julio y agosto, aun previendo que este mes va a tener un salto en la inflación producto de la devaluación”, expresó el titular de la cartera de Trabajo. “El acuerdo paritario fue previsto y diseñado con un esquema de inflación alta. La cláusula de actualización se va a aplicar en tanto y en cuanto la inflación supere esos porcentajes. Y si no, seguiremos con los porcentajes acordados”, añadió.
Cláusula gatillo
En tanto, desde Amsafé se mostraron cautos ante las declaraciones del ministro de Trabajo provincial. Es que entienden que las medidas anunciadas por Sergio Massa quedaban “a mitad de camino” y no cumplían con las expectativas del sector. “En primer lugar, no incluye a todos los trabajadores, sino que contempla solo a los que tienen un salario menor a 400 mil pesos. Y en segundo lugar, si lo que se entrega es un adelanto de la paritaria, no se estaría otorgando un aumento genuino del salario para los trabajadores”, evaluó Rodrigo Alonso, secretario general de Amsafé en declaraciones a Rosario/12.
“Si uno traslada la propuesta del gobierno nacional a la provincia de Santa Fe, va a haber muchos trabajadores que no van a percibir ningún incremento del que se está planteado, pero también trabajadores que lo percibirían y que en los últimos tramos de aumento paritario, como en noviembre y diciembre, no tendrían aumentos porque ya se les estuvo adelantando con este mecanismo”, profundizó.
Ante ese escenario, el planteo de los docentes públicos consiste en realizar un pequeño ajuste a la paritaria acordada: incorporar la cláusula gatillo automática para los casos en que la inflación supere al aumento salarial, sin necesidad de esperar a los meses en que están previstas las revisiones. “Nosotros planteamos que no se espere a octubre y diciembre, sino que de forma automática, cuando la inflación supere al acuerdo salarial, inmediatamente la provincia abone la diferencia. Eso permite mantener el acuerdo sin perder con la inflación”, aclaró.
En ese maco, Alonso explicó que el 25% de aumento que los docentes del sector público deben percibir en el próximo recibo de sueldo, implica un incremento que va desde los 33 mil hasta los 50 mil pesos en los cargos de bases, con un impacto mayor en los cargos jerarquizados. Por el momento, sostuvo que aguardarán a conocer cuál es el número final de la inflación de agosto que, en principio se conocería a mediados de septiembre, para reclamar algún tipo de recomposición.
“Con este 25% en agosto vamos a recibir un 74,1% de aumento salarial. Por lo tanto nosotros deberíamos tener en cuenta cuál es la inflación de agosto para ver si supera o no, el aumento que vamos a percibir los primeros días de septiembre. Si queda por debajo, lo primero que vamos a exigir desde Amsafé es que el gobierno active la cláusula de actualización”, finalizó.