Una semana después de que el presidente de la Federación Española de Fútbol Luis Rubiales, besó a una jugadora durante la ceremonia de premiación del Mundial femenino, Peligro de Wolf consiguió el teléfono del propio Rubiales, lo llamamos, no nos atendió, pero obtuvimos el siguiente diálogo (con su secretario):
- Buenas tardes ¿Está el señor Luis Rubiales?
- Sí, ¿por qué asunto?
- Para hacerle algunas preguntas vinculadas al beso sin consentimiento que le dio a la futbolista Jenni Hermoso tras la final del Mundial femenino.
- Ah, entonces no está.
- Dígale a Rubiales que dé la cara.
- Dice que él la daría de mil amores, pero apenas tiene una y la necesita.
- Dígale que entonces es un cobarde.
- Dice que no está y que más cobarde será usted.
- ¿Por qué no quiere hablar?
- Si usted lo conociera, es tan tímido…
- No creo que lo sea, cuando besó a la futbolista no se comportó como una persona tímida. Quiero preguntarle por qué la besó en la boca.
- No fue en La Boca. Fue en Sidney.
- No me refiero a la “Boca” en tanto barrio sino de la “boca” en tanto parte de la cara. Aquello que hizo fue un acto no consentido.
- Para nada. En el próximo partido de la selección femenina a alguna de las jugadoras le va a dar una sorpresa.
- ¿Le va a dar otro beso sin consentimiento?
- ¿Será posible? Ya echó a perder la sorpresa. Rubiales utiliza el beso para medir el grado de euforia de toda futbolista tras una conquista deportiva.
- No le creo nada.
- ¿Me cree si le digo que quería chequear si la chica tenía buen aliento o no?
- Menos
- ¿Y que estaba haciendo la coreografía de la canción “Beso a beso” de la Mona Jiménez?
- Para nada.
- ¿Y que Rubiales pensó que estábamos en la Semana de la Dulzura? Porque él le dio un beso esperando que a cambio la chica le dé una golosina.
- Eso es ridículo.
- ¿Tampoco me cree si le digo que Rubiales confundió a la chica con su novia?
- ¿Su novia también juega al fútbol?
- Yo no tengo novia.
- La novia de Rubiales.
- No voy a hablar de su vida privada. Rubiales dice que no puede privar a ninguna mujer de los encantos de su boca. Que con Jenni Hermoso simplemente ha querido cultivar una sana y sincera amistad como una forma divertida y emocionante de romper la monotonía.
- Dígale que es un idiota, un pervertido, un psicópata, un machirulo y un caradura.
- Acá Rubiales me dice que no es ningún idiota. Él no tiene ni un pelo de pervertido, ni un pelo de psicópata ni un pelo de machirulo y ni un pelo de caradura.
- En eso de tener ni un pelo estamos todos de acuerdo.
- Rubiales me dice que no insista, que no piensa dimitir.
- Dígale que si no renuncia lo van a obligar a renunciar a su puesto de presidente de la Real Federación Española de Fútbol.
- Me dice Rubiales que si lo echan, se la corta.
- ¿Qué prefiere: cuchillo o tijeras?