Un hombre sufre Alzheimer. Cuatro personas están a cargo de su cuidado. Uno de ellos habilita el ingreso de visitantes que someten al paciente a una serie de castigos; lo hace por una módica suma de dinero. Afuera del edificio donde el hombre está confinado hay escraches permanentes porque el hombre en cuestión es un genocida de la última dictadura. Ese es el conflicto de Estertor, película dirigida por Sofía Jallinsky y Juan Basovih Marinaro que se estrena este jueves a las 18 en la sala Leopoldo Lugones del Teatro San Martín (Av. Corrientes 1530).

“Al igual que en nuestra película anterior, Palestra, teníamos ganas de explorar las relaciones de poder, la violencia grupal, lo que sucede en pequeños espacios donde todos están alienados y se llega a situaciones incomprensibles”, relata Basovih, y confiesa que durante la pandemia estuvo obsesionado con el tema del Alzheimer. “No me preguntes por qué pero había algo que me perturbaba. Investigaba y leía cosas hasta que en una charla con un amigo surgió el tema y empezó a hablar de su padrastro, que había sido bastante violento tanto física como verbalmente. Él fue diagnosticado con Alzheimer y yo le hice una pregunta un poco salvaje que sólo fue posible formular por los años de amistad. Le pregunté si no había imaginado tomar revancha después de todo ese daño, pero él es un ser amoroso y respondió que no porque ahí ya no estaba su padrastro”.

La operación de darle Alzheimer a un genocida plantea un juego interesante por el poder metafórico de esa falta de memoria. “Yo tengo un tío desaparecido y fui a un colegio bastante de derecha, compartí con familias que tenían vínculos con genocidas, gente que creía en la teoría de los dos demonios", cuenta Jallinsky. "Era muy fuerte ser chica, tener a mi tío desaparecido y ver que esa gente ni siquiera consideraba que eso había sido una tortura por parte del Estado”. La película se inscribe en un clima de época particular: el director cuenta que sus orígenes se remontan a la segunda fase de la cuarentena, cuando las calles estaban tomadas por “personajes bastante fachos y retrógrados”. “Salían a la calle a protestar, en Plaza de Mayo colgaban bolsas mortuorias aludiendo a las Abuelas. Estrenarla hoy nos moviliza porque no pensamos llegar a esto antes de las elecciones. De alguna manera la gestación se encuentra con la exhibición”, destaca Basovih.

-Estertor aborda desde el presente un período bastante retratado en la cinematografía nacional, aunque no de este modo. ¿Cómo piensan eso?

Sofía Jallinsky: -Creo que no hicimos una película sobre la dictadura. Queríamos acercarnos a esa época desde la contemporaneidad: pensar qué está pensando hoy, cuál es el vínculo del presente con la dictadura y enfocarnos en la falta de memoria para tratar de entender la violencia actual, por qué empezaron a surgir de nuevo estos discursos, quiénes son estos personajes, por qué hay gente que no le importa si torturaron a alguien. Hay muchas películas que retratan muy bien el período y le hacen justicia a la historia, pero no queríamos seguir hablando desde ese lugar.

Juan Basovih: -Hoy podemos tomar distancia. Los personajes que vemos en la película existen, son contemporáneos, los vemos. Obviamente hay peores. Espero que no, pero podríamos llegar a tener una vicepresidenta negacionista. Hay una violencia constante y un humor que juega con cuestiones que creíamos saldadas. Diría que hay algo juvenil en este abordaje: la joda, la violencia, la molestia constante. La naturalidad de estos personajes es la misma con la que se dicen barbaridades en los medios o en redes.

Podría suponerse que en esa revancha hay algo político, pero esa dimensión está totalmente ausente. Las personas que ejercen violencia sobre el genocida son cuatro precarizados que están aburridos y son apolíticos. “Quienes castigan al hombre lo hacen por desidia cultural y educacional, nos parecía interesante poner en juego todas estas piezas alrededor de un genocida”, destaca Basovih, y Jallinsky agrega una dimensión económica en el conflicto: “El problema en esa casa es que tienen un laburo mal pago y un jefe que los maltrata. Hay un personaje que opera como el desclasado, alguien que es de clase baja y pasó a clase media, entonces empieza a bardear a los de abajo. Lo interesante es que cuando el humano tiene la oportunidad de ejercer control y poder sobre el más débil, lo ejecuta. Mucho más si está en grupo”.

Estertor.

En Estertor repitieron el elenco de su ópera prima y sumaron a Raquel Ameri. Casi todos provienen del teatro, y no es un detalle menor en la impronta de actuación y el tono del film. Los directores dicen que la lógica de trabajo es más teatral que cinematográfica: el tiempo de ensayo previo es fundamental y el foco está puesto sobre todo en la fase de rodaje, en eso que sucede frente a la cámara con los actores. Cuando se les pregunta por las referencias que fueron apareciendo en el proceso, mencionan a directores como Yorgos Lanthimos con Canino o Lars von Trier con Los idiotas, el tono de Todd Solondz o la forma de dirigir actores y manejar la cámara de John Cassavetes. En la lista también aparece la disciplina teatral con Marina Otero y la literatura argentina de la mano de Mariana Enriquez, Samanta Schweblin o Ariana Harwicz.

La incomodidad atraviesa toda la película. Basovih explica que eso ya estaba presente en el guion pero hubo cosas que fueron descubriendo en los ensayos. “Nunca tuvimos miedo a la hora de pensar las escenas e ir a fondo. No veo que se pueda retratar personajes de esta calaña siendo livianos. En los ensayos surgían cosas mucho más bestiales que fuimos suavizando para que entraran en el relato. Desde el inicio hubo una decisión de mezclar el humor con el drama”. En tiempos de corrección política, el humor es transgresor porque juega con los bordes; Jallinsky explica que desde Palestra  vienen trabajando con ese elemento: “Si nos quedamos con los discursos políticamente correctos y películas que tienen una bajada de línea muy obvia, después no podemos dialogar con un tipo que vota a Milei. Me parece que hoy es muy necesario hablar de cosas incómodas”.