La Cámara Federal porteña tiene que decidir si convalida la decisión del juez Marcelo Martínez de Giorgi de sobreseer a todos los funcionarios del Servicio Penitenciario Federal (SPF) que estaban acusados por espiar a los exfuncionarios y empresarios kirchneristas que estuvieron presos durante el gobierno de Mauricio Macri. En el tribunal ya empezaron a conocerse los signos de agobio: el camarista Pablo Bertuzzi intentó excusarse de intervenir, pero le rechazaron su solicitud.
El 16 de agosto pasado, Martínez de Giorgi sobreseyó al exdirector del SPF Emiliano Blanco, a Cristian Suriano (Inteligencia del SPF), Miguel Perrotta (Jurídicos del SPF) y al exasesor Fernando Carra, entre otros. El juez no dijo que no haya existido vigilancia ilegal sobre los presos kirchneristas, sino que la pesquisa era nula.
¿Por qué Martínez de Giorgi dice que la investigación es nula? Porque entiende que el primer magistrado que tuvo la causa, el juez de Lomas de Zamora Federico Villena, guionó a dos testigos de identidad reservada para comprometer a las autoridades del SPF. Para Martínez de Giorgi, Villena ideó esa maniobra para defenderse porque él mismo aparecía en distintas circunstancias habilitando a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) a realizar escuchas de los presos o teniendo causas "paraguas".
Las apelaciones a ese fallo ya llegaron a la Cámara Federal, y Bertuzzi se excusó porque había compartido diversas reuniones sociales y eventos personales con Villena –que ahora aparece apuntado por Martínez de Giorgi. Sin embargo, Bertuzzi dijo que no podía decirse que los unía una amistad íntima –lo que avalaría que sea separado del expediente–.
Ése fue el argumento que utilizó Eduardo Farah para rechazar la pretensión de su colega de correrse de la causa. "El apartamiento por exclusivas razones de decoro y delicadeza –que en encomiable actitud– intenta el juez, no configura a mi manera de ver una causal que conduzca a aceptar esa determinación, al no advertirse circunstancias que despierten, por sí solas, fundadas sospechas de parcialidad", escribió Farah.
La Sala II, para este caso, se completa con Mariano Llorens. Bertuzzi y Llorens ya votaron juntos en esta causa para revocar la mayoría de los procesamientos que habían sido dictados mientras el expediente tramitaba en Lomas de Zamora y, de esa forma, convalidar la teoría del espionaje cuentapropista.