El gobierno francés presentó un proyecto para prohibir el uso de referencias cárnicas para nombrar a platos veganos y productos de origen vegetal, como por ejemplo “costillas vegetarianas”, “parrilla vegana” y “hamburguesa vegana”, entre otros. Una vez aprobada, la normativa restringirá el uso de 21 nombres relacionados con la carne, según explicaron desde el Ministerio de Agricultura francés.
El decreto alcanzará solo a los productos fabricados y vendidos en ese país, y no a las importaciones europeas. Además, el documento aclara que unas 120 denominaciones asociadas a la carne, como “jamón”, “salchicha”, “nugget” o “bacon”, seguirán vigentes siempre y cuando los productos no superan una determinada cantidad de proteínas vegetales, con porcentajes que oscilan entre el 0,5% y el 6%.
Asimismo el proyecto prevé sanciones en caso de infracción. La medida entrará en vigor tres meses después de su publicación para dar tiempo a los productores a adaptar sus etiquetados y poder comercializar los productos fabricados o etiquetados previo a la normativa hasta agotar stock.
Si bien desde junio de 2022 regía en Francia una ley de etiquetado que ya prohibía nombrar a los alimentos de origen vegetal con términos utilizados para definir a los productos de origen animal, el Consejo de Estado, el tribunal administrativo más alto del país, suspendió su implementación argumentando que el tiempo de su redacción había sido demasiado corto. Desde entonces el Gobierno trabajó en un nuevo proyecto, teniendo en cuenta esas "observaciones" para la nueva presentación.
“Este nuevo proyecto de decreto refleja nuestra voluntad de poner fin a las afirmaciones engañosas previstas por la ley utilizando denominaciones relativas a productos cárnicos para los alimentos que no los contienen", afirmó el ministro de Agricultura, Marc Fesneau.
"Es una cuestión de transparencia y equidad que responde a una expectativa legítima de consumidores y productores. Para mantener el vínculo de confianza con los consumidores, el etiquetado y su inteligibilidad son fundamentales. Éste es el objetivo de este decreto y de toda la política gubernamental en este ámbito", agregó.
Sin embargo, la iniciativa fue cuestionada por activistas por los derechos de los animales. “¿La gente confunde el aceite de motor, el aceite de oliva y el aceite de jojoba? Yo creo que no. No más de lo que confunden el bistec vegano con el bistec de ternera”, sostuvo por ejemplo Brigitte Gothière, del grupo francés de derechos de los animales L214.
"En lugar de atacar las palabras, este gobierno debería atacar los males: el sufrimiento animal y humano, el calentamiento global del que la ganadería es en gran parte responsable... ¡qué desesperación!", sostuvo por su parte Catherine Hélayel, del partido francés Animalista.