El ministro de Economía y candidato presidencial de Unión por la Patria (UxP) Sergio Massa prometió que si es elegido como presidente en estas elecciones 2023, eliminará el Impuesto a las Ganancias. El tributo, que alcanza alrededor de 700 mil argentinos y argentinas, grava entre el 5% y 35% de los ingresos brutos de estos contribuyentes. Cómo quedaría el sueldo con la medida.
"Si soy presidente, los trabajadores no van a pagar Ganancias", anticipó Massa, quien incluso advirtió que la decisión “tal vez” podría tomarse antes. Además, adelantó: “Ya lo vengo planteando y dentro de poquito voy a mandar una ley con el tema Ganancias”.
Cómo impactaría en el contribuyente la eliminación del Impuesto a las Ganancias
En caso de implementarse la medida, en determinados sueldos “puede ser casi un incremento de un 35%”, señaló a Página|12 el contador tributarista Guillermo Poch. El impuesto se basa en un esquema de escalas con distintas alícuotas establecidas en función del monto del ingreso bruto del contribuyente.
Las alícuotas de las escalas van del 5% al 35%, por lo que, en caso de eliminarse el tributo, se trasladaría el porcentaje en la misma medida que la alícuota que se paga. Es decir, si se abona un 25% de Ganancias, el ingreso que llegaría a la mano del contribuyente sería un 25% más alto. “Lo que sucede es que, una vez que se supera el piso de Ganancias, el contribuyente rápidamente llega al valor de las alícuotas caras”, observa Poch.
“El que tiene un sueldo de $900.000 brutos, hoy está pagando $40.000 o $50.000 por el impuesto, más o menos”, ejemplificó el contador público José Luis Ceteri. “Lógicamente, si le dejás de gravar, ese dinero lo va a destinar al consumo”.
Para Poch, que ese dinero vaya al consumo podría ser una opción, pero advierte que otros podrían destinarlo al ahorro. Si bien el especialista considera “necesaria” la eliminación del impuesto, aclara que sí “tiene que ser pagado por gente con sueldos muy altos, que tiene capacidad de ahorro; y si no existe ese margen de ahorro, el gravamen no se tendría que estar aplicando o la alícuota debiera ser muy baja”.
“¿Todo sueldo debe dejar de pagar ganancias? No. Es una afirmación, para mí, errónea", suma Ceteri. "Porque hay niveles gerenciales que deberían contribuir y pagarlo". Ceteri también destaca que, en caso de eliminarse el impuesto, debería incluir a los autónomos, porque si no “sería injusto” con ellos.
Por último, está el factor de la litigiosidad. El Impuesto a las Ganancias muchas veces es objeto de reclamos judiciales en los que el contribuyente debe incurrir en gastos. “Hay determinadas situaciones que pueden resultar controvertidas. Eliminando el gravamen, en muchos casos automáticamente salís del problema judicial”, plantea Poch.
A quiénes beneficiaría la medida
Actualmente, el piso de Ganancias se encuentra en $700.875 brutos —a partir de los sueldos devengados en agosto de 2023—, por lo tanto, todos aquellos que cuenten con un ingreso mayor, deben pagarlo. Ambos especialistas consideran que, desde que se creó, el tributo fue ampliándose y masificándose.
Desde 2015 a 2019, durante el gobierno de Mauricio Macri, la cantidad de trabajadores en relación de dependencia alcanzados por el impuesto aumentó de 1,19 millones a 2,14 millones, según los datos oficiales de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y el Ministerio de Trabajo. Actualmente, según Poch, ese número ronda las 700.000 personas, dado que este Gobierno siempre buscó que, a pesar de la inflación, el número no aumente.
Cuánto es y cómo calculo el Impuesto a las Ganancias de mi salario
Dado que el impuesto se liquida de forma anual, el cálculo debe hacerse tomando el ingreso bruto de cada uno de los 12 meses del año. Los ingresos que se toman en cuenta pueden estar conformados por sueldos, honorarios, alquileres, dividendos de una sociedad o empresa propia.
Ahora bien, sobre estos ingresos también se pueden realizar distintas deducciones, como cargas de familia por cónyuge, hijos, hijos discapacitados, servicio doméstico, actividad educativa de hijos de hasta 24 años, gastos de sepelio, seguros de vida e intereses de créditos hipotecarios, entre otros.
Para hacer el cálculo se debe sumar todo el ingreso anual y restarle estas deducciones especiales. El monto total que surge de ese cálculo define si el contribuyente integra una escala del tributo u otra, que van progresivamente desde alícuotas del 5% al 35%.
Si dicho importe queda por debajo del piso imponible de $700.875 brutos, la persona no debe pagar el gravamen. Y si los supera, solo resta ver en qué escala queda alcanzado para ver cuál es el porcentaje a tributar.