“¿Sabés la cantidad de denuncias que tenemos en Defensa al Consumidor? Hacela, total no nos presentamos.” Según cuenta Daiana Musa, una de las denunciantes por estafa cometida presuntamente por la empresa Sin Escalas Turismo, ésa fue la respuesta de María Eugenia Guerbi el día que se reunieron en un café de Dolores a mediados de 2022. La idea del encuentro era recuperar el dinero que había gastado en un paquete para viajar a Colombia. Guerbi fue en representación de la empresa. Hoy, integra la lista del candidato de Juntos por el Cambio a la reelección en Dolores, Camilo Etchevarren.
La estafa que denuncia Musa podría alcanzar ya los 500 damnificados. “Hay casos de jubilados que viajaban por primera vez, y hasta la situación de un paciente oncológico que quería hacer un viaje con su familia a modo de despedida”, relata. Su compra fue en enero del 2022. Cree Musa que este mecanismo viene de hace tiempo y no se circunscribe, como quiere hacer creer la empresa, a los últimos meses. "Hoy están todas las cuentas vacías, ¿qué hicieron con toda la plata?"
Respecto a Guerbi, un comunicado firmado en representación de las víctimas que no pudieron llevar a cabo sus viajes solicita la renuncia de la funcionaria municipal que compite como candidata a tercera concejala suplente de Etchevarren. También trabaja dentro del Hospital Municipal San Roque de Dolores.
La situación de la empresa es clara: hace una semana cerró, dejando a mucha gente sin respuestas sobre viajes pagados y planificados para los meses de septiembre y octubre. En sus redes sociales, la firma tiene sus últimos posteos, aparentemente hechos por un grupo de empleados, entre el 31 de agosto y el 1 de septiembre. Allí exponen a Ángel Cerillano, dueño de la empresa, y a Juan José Figueroa, jefe de Finanzas, y dicen que perdieron contacto con ellos. Muchas víctimas se dirigieron al domicilio de Sin Escala Turismo y grabaron el estado de las instalaciones y a unos pocos empleados que no tenían respuesta sobre la situación. Este diario tuvo acceso a la filmación y pudo comprobar que en uno de los pizarrones figura el nombre de Guerbi, la directiva multifunción.
En las últimas horas, un grupo de clientes estafados logró dar con el paradero de Cerillano en un domicilio de Capital Federal. Planean congregarse para reclamar personalmente por el dinero que depositaron como parte o totalidad de los viajes que fueron cancelándose sin ningún tipo de reintegro.
Musa es abogada. Dice que esa condición profesional le permitió no ser avasallada y a la vez poder darle continuidad a su demanda. “Tuvieron un modus operandi donde se te caían los vuelos o el hospedaje, te dejaban de responder, te pasaban de un empleado a otro y tenías que terminar hablando con el dueño, Cerillano”, relata. En su caso, contactó a una socia de Cerillano, Agustina Rocha, por redes sociales. Eso le permitió concretar una reunión y tuvo que viajar desde su localidad, Olavarría, hasta Dolores. Allí la recibió Guerbi. Musa fue con su hermano, quien fue testigo de la charla en la que "recomendaba" iniciar acciones en Defensa al Consumidor.
“Ella quería que firmara un documento donde le aseguraba que no iniciaría acciones legales, pero a cambio me daban sólo la mitad de la plata”, recuerda Musa sobre su conversación con Guerbi. De parte de la funcionaria no hubo ninguna declaración pública. No respondió a las preguntas de BuenosAires/12. El mismo silencio hizo el secretario de Turismo local, Leandro Oldoni.
La abogada cuenta que muchos de los casos que afloran por estos días son situaciones similares a las que le tocó vivir hace más de un año. Pero quienes no tienen conocimientos legales desistían de avanzar con una denuncia luego de frustrase en las audiencias llevadas a cabo ante Defensa al Consumidor.
Una de las particularidades que señala Musa junto a Victoria Cerri, Marcelo Petrucci y Santiago Tango, los cuatro damnificados firmantes del comunicado en representación de los restantes, es que Sin Escala Turismo era el nombre de fantasía de la agencia de viajes, pero no funcionaba bajo una sola sociedad, sino dos. En ambas, Cerillano y Rocha figuran como miembros. La primera es Servicios de Turismo Sin Escala SRL y la otra Viajes y Turismos Sin Escala SRL. “Ambas inscriptas con idéntico objeto social”, pero con la diferencia de que solo la segunda estaba inscripta en el Ministerio de Turismo y Deporte de la Nación. “Recién hoy viernes pude ver que la dieron de baja, porque hasta ayer estaba vigente”, dice Musa.
Más allá de la situación de Cerillano, quienes han sido notificados judicialmente bajo la causa N° 03004467/23 investigada por la UFI N° 1 de Dolores a cargo de Verónica Raggio, son Rocha, Figueroa y también Leticia Ferreira, una de las vendedoras y esposa de Cerillano. Para Musa, la investigación debe ampliarse a Guerbi, que se presentaba como Gerenta de la firma. También según los afectados debería recaer sobre Iván Calderón y Juan Gabriel Molina, por ser vendedores que en reiteradas ocasiones habrían sido quienes, a sabiendas de que las reservas de vuelos u hospedaje se caerían, llevaban adelante una maniobra dilatoria para evitar las denuncias.
“Al resto de los empleados no los podemos identificar, pero entendemos que todos los empleados son responsables porque sabían manejo de la empresa”, resalta Musa.
Cómo operaban
Sin Escala Turismo tenía sede en Dolores pero, según explica Musa, también operaba con un perfil que aludía a una sede en Pilar. Y sospecha que había una tercera sede en Uruguay. “Vos te comunicabas por las redes, te empezaba a hablar un vendedor que después te pasaba los tickets”, relata la damnificada. Dada su experiencia, en todo momento asegura que hizo un seguimiento del estado de los pasajes, y fue así que descubrió que su vuelo con la aerolínea Avianca fue dado de baja.
“Me puse contacto y terminé en acciones judiciales y se les embargaron las cuentas”. Con ese contexto, Cerillano llamó a Musa y, en mayo de este año, firmaron y homologaron un acuerdo y levantaron el embargo. Según Musa, solo pagaron un par de cuotas del acuerdo y el miércoles 30 de agosto por la tarde fue el último contacto con Cerillano. “Evidentemente fue otra forma de ganar tiempo, porque varios firmaron estos acuerdos con la expectativa de recuperar lo gastado”, cuenta.
Consultada sobre si alguien en la Municipalidad de Dolores o la propia Guerbi se puso en contacto, dice que no.
Con este escenario, la empresa, a través de Cerillano, presentó un pedido de apertura de concurso preventivo. Entre sus argumentos, señala que ingresó en cesación de pagos por inconvenientes que empezaron a darse en mayo. Según la presentación hecha por la firma, básicamente fueron ellos los estafados por un tal Juan Cabrera, que desconoció una compra sobre la cual la empresa ya había hecho gastos. Eso motivó a contraer deudas con empresas hoteleras, utilizar dinero de ventas a futuro, y así ingresar a una espiral de la que no pudo salir.
“Es todo mentira, a mí me hicieron esto en marzo del 2022”, remarca Musa. A esto, suma que desde la firma culpan, por ejemplo, a la aerolínea Avianca de dejar varada gente por problemas ajenos a Sin Escala y eso “afectó la imagen”. “En mi caso, nadie de Sin Escala se presentó a la mediación en Defensa al Consumidor, pero sí lo hizo Avianca, que aclaró que los tickets se dieron de baja por falta de pago y señaló a Molina, vendedor de la firma”.
A la espera de ser reconocida como particular damnificada y así tener acceso a la causa, Musa repite que la investigación debe hacer extensiva a todos los empleados de Sin Escala y “esto debe verse como una asociación ilícita para que, más allá de que no podamos recuperar nuestro dinero, se haga justica con ellos”.