Las figuras más prominentes de la Iglesia Católica en la provincia de Salta se expresaron ayer públicamente sobre los insultos proferidos por el candidato a presidente de La Libertad Avanza, Javier Milei, en contra del Papa Francisco.
"Lo que dice no responde a la verdad y es un despropósito lo que él ha dicho. Y es una mentira lo que él ha dicho", aseguró ayer el arzobispo de Salta, Mario Cargnello, en relación a la afirmación del ultraderechista, que sostuvo que el Papa promueve el "comunismo" en el mundo y es el "representante del maligno en la tierra".
Sin nombrarlo, el arzobispo le respondió, en declaracionas al canal Cable a Tierra: "Lo acusa de que él (el Papa) difunde el comunismo, no es verdad. Sería interesante que él (Milei) lea un poco de doctrina social de la Iglesia para darse cuenta cuáles son los fundamentos de los cuales se habla y para entender el mensaje del Papa", sostuvo Cargnello. Los dichos de la máxima autoridad de la Iglesia en la provincia tienen más peso si se tiene en cuenta que fueron dichas en vísperas de la Fiesta del Señor y la Virgen del Milagro, la mayor expresión de fe de esta provincia.
Por otro lado, en declaraciones a Radio Nacional Tartagal, el obispo de Orán, Luis Scozzina, afirmó que "Lo primero que la Iglesia le puede ofrecer a este buen hombre es el perdón por los agravios, por lo gratuito, y también por pretender descalificar una postura que a lo mejor no coincide con su visión".
En el mismo sentido, el obispo destacó la figura del Papa, "uno de los líderes a nivel global que tiene una mayor aceptación y una mayor acogida en ámbitos que no son precisamente el ámbito católico o el ámbito creyente", sobre todo a partir de sus "grandes encíclicas", Laudato Si, sobre ecología integral, "donde plantea esta unidad entre la ecología social y la ecología natural, es decir, no existe una visión de comprender una ecología sin el problema de la pobreza y las situaciones de desigualdad" y Fratteli Tutti, sobre la fraternidad humana, en la que plantea "que el problema actual se resuelve a través de la política, y de la buena política".
E igual que el arzobispo, aclaró que esta visión "no es propia del Papa Francisco, es una visión de la doctrina social de la Iglesia". Scozzina recordó en este sentido que "ya desde el siglo pasado, desde la primera encíclica Rerum Novarum la Iglesia siempre ha comprendido que el anuncio del Evangelio va unido siempre a un compromiso social", y opinó que "por lo tanto, estos discursos agresivos, descalificantes, son discursos ideológicos que por lo menos desde mi perspectiva no habría que de alguna responder como si fuese una cuestión que estaría en discusión".
Sobre los agravios descalificantes, el obispo consideró que "uno tiene que pedir la conversión y el perdón" y a continuación dijo aquello de que lo primero que la Iglesia le puede ofrecer a Milei "es el perdón por los agravios, por lo gratuito".