A mediados de la semana pasada, el ministro de Economía, Sergio Massa, anticipó una de las medidas para un posible gobierno a partir del 10 de diciembre: eliminar el impuesto a las Ganancias para los trabajadores. Este lunes a las 17, recibirá a los principales dirigentes de la Confederación General del Trabajo (CGT) y de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) para hablar de la promesa de que sea "tal vez antes". Según trascendió, se anunciará un nuevo piso de un millón de pesos de salario bruto para pagar el tributo.
La herramienta que tiene Massa a mano es la posibilidad de volver a subir el piso de ganancias vía decreto y generar, de hecho, que casi el total de los trabajadores y jubilados dejen de pagar el impuesto en lo que queda de este año. En la actualidad, según el Ministerio de Economía, solo el 7 por ciento de los trabajadores sería alcanzado por el impuesto en diciembre de este año, pero buscarán reducirlo.
Trabajadores sin Impuesto a las Ganancias
La cita de Massa con los dirigentes gremiales será en el Palacio de Hacienda y la CGT decidió acompañarlo con una movilización al edificio ubicado frente a Plaza de Mayo. Junto al ministro de Economía estará la ministra de Trabajo, Raquel "Kelly" Olmos; y entre los referentes sindicales serán de la partida Héctor Daer, Hugo Moyano, Carlos Acuña, Sergio Palazzo, Guillermo Moser y Hugo Yasky.
También estarán presentes representantes del bloque del oficialismo de la Cámara de Diputados. Massa se reunió el viernes pasado con su equipo económico para afinar el lápiz y diseñar un proyecto de ley que enviaría al Congreso el 10 de diciembre, tal como lo prometió, pero que también podría llegar en las próximas semanas, para mostrar si la oposición está dispuesto a votarlo tal como exigieron la semana pasada, tras la promesa de campaña del candidato presidencial de Unión por la Patria.
El proyecto de Massa, según trascendió, dejaría fuera del pago del impuesto a las Ganancias a casi el total de los trabajadores bajo relación de dependencia, ya que quedarían alcanzados solo directores de las sociedades anónimas, los CEOs, gerentes y subgerentes y pensiones de privilegio. Pero además trazaría el mecanismo de compesación para equilibrar las cuentas del Estado, por el impacto de que más de un millón de trabajadores dejen de pagar el impuesto.
Nuevo piso de Ganancias
La presencia de los sindicalistas esta tarde en el Palacio de Hacienda tendría tono de celebración para sus representados, debido a que desde el Ministerio de Economía se tomó la decisión de elevar el monto mínimo no imponible sensiblemente por encima de la cifra que rige en la actualidad, para la gran mayoría de los trabajadores y jubilados dejen de pagar el impuesto desde octubre, sin importar cuál sea la suerte del proyecto que se envíe a la Cámara de Diputados.
Esta idea es realizable debido a que esa modificación se puede realizar a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU). Tras la última modificación de las escalas y del mínimo no imponible en la actualidad, tributan Ganancias alrededor de 1,9 millones de trabajadores. La cifra de actualización para que el impuesto solo alcance a los trabajadores de altos cargos de gerencia estaría en llevar el piso a 1 millones de pesos brutos mensuales.
¿Quiénes pagan Ganancias en la actualidad?
Desde agosto están exentos de Ganancias los salarios de hasta poco más de 700.000 pesos. Con los incrementos salariales a diciembre de 2023 que llevarían esos salarios a 890.000, el impuesto alcanzaría a un 7 por ciento de los trabajadores en relación dependencia. Durante el gobierno de Juntos por el Cambio, en el que el ex presidente Mauricio Macri prometió eliminar el impuesto, terminaron pagado Ganancias un 30% del total de los trabajadores.
En agosto pasado, el Ministerio de Economía anunció el último incremento del mínimo no imponible, con una suba del 38,45 por ciento. Se trató del equivalente a la variación de los salarios formales (RIPTE) en marzo, abril, mayo y junio. Con el incremento aplicado quedaron fuera del pago aquellos salarios brutos por debajo de los 700.875 pesos. Mientras que se agregó otro beneficio con una deducción especial para los salarios que se ubicaran entre el mínimos y los 808.101 pesos.
Con esa decisión, en agosto pasado, se incrementó el piso desde un mínimo de 506.230 pesos, por el que quedaban alcanzados unos 1.015.000 contribuyentes. Con la actualización, 300.000 de esos trabajadores en relación de dependencia dejaron de pagar el gravamen a partir de agosto; mientras que los 715.000 restantes comenzaron a recibir una reducción de los montos retenidos, por una suba del 35 por ciento en las escalas. El nuevo objetivo de Massa será acotar el alcance del impuesto a los cargos gerenciales.