"La música es mi canal a tierra, traspasa todo. Me da la posibilidad de transmitir todo lo que me pasa, ya sea una tristeza, una alegría o cualquier emoción. Cuando yo interpreto una canción, le pongo todo lo que me pasa, porque lo más lindo que tiene el artista es poder llegarle al otro con su música y generarle algo. Todos queremos dejar una letra o una melodía que genere algo en las fibras", afirma Sergio Herlin, más conocido como "Serge", un cantante de pop que cuenta con una historia de vida basada en la constancia y la autosuperación. Nacido en el partido bonaerense de Exaltación de la Cruz, el artista repasa su carrera musical, el estreno reciente de su sencillo "Empezar", y una infancia que lo tuvo como víctima del bullying.
Nacido el 18 de octubre de 1977 en Capilla del Señor, estrenó hace un mes una canción de pop melódico que es el primer corte de su reciente material de estudio. Explica: "'Empezar' habla, entre muchas cosas, sobre las relaciones tóxicas que las personas tenemos en pareja, familia o con gente con la cual convivimos. A veces necesitamos dar fin para volver a empezar".
El cuarto de cinco hermanos, se crió donde nació, y desarrolló la infancia de cualquier pibe de pueblo. "A pesar de todo tuve una infancia muy linda, como todo chico me crié en un barrio, entonces llegaba del colegio y me iba directo a la calle", recuerda Serge, que mientras cursó sus estudios primarios, fue blanco de cargadas para sus compañeros. "Desde chico sufrí mucho bullying, y es algo que le pasa a mucha gente. Cuando te quieren cargar lo hacen por tu contextura física, tu color de piel, tu sexualidad o lo que sea. Hoy, si bien se ve todavía, la sociedad está preparada de otra manera. En esa época era mucho más fuerte y me provocaba mucha tristeza. Todavía falta apertura y poder identificar al otro como un par", afirma.
En medio de ese laberinto doloroso, Herlin asegura que "la música me jugó a favor porque me acompañó muchas veces". "Cuando me sentía muy triste por lo que vivía, en los peores momentos, fue la música quien me levantaba y me transportaba con solo escucharla, y cuando empecé a cantar, más aún. En los momentos en los que no sabes para donde disparar, la letra y la melodía llegan y te sanan", afirma.
"Hace mucho hago terapia, cuando uno es chico no tiene herramientas, pero aprendí que uno tiene otra manera de defenderse cuando es grande. En los niños, una palabra o una agresión se arrastra, si pasa el tiempo y no te sacas eso cuando sos niño el cuerpo lo manifiesta. Es como una olla a presión que explota. Yo me lo saqué gracias al canto", reflexiona.
Que Serge haya encontrado su desahogo en la música se explica en la pasión que tenía su padre José por el tango. "Mi padre, que era ferroviario, nos cantaba constantemente a mí a mis hermanos. Tenía ese don, pero no tuvo suerte. Le gustaba mucho el tango, yo lo escuchaba levantarse temprano y cantar. Él sintonizaba los temas de Jorge Valdez, que tenía una voz prodigiosa. También escuchaba el folclore de Horacio Guarany". recuerda el cantante.
Al terminar sus estudios secundarios, Serge realizó un curso de masajes para contar con un ingreso extra, ya que trabajaba en el comercio de sus padres. Con 25 años ingresó en el Coro Municipal de Exaltación de la Cruz, que realizaba sus ensayos en la Casa de la Cultura. "Era un coro a cuatro voces, había tenores, bajos, contraltos y sopranos", explica el cantante, que se desempañaba como contratenor, ya que cuenta con una voz más aguda. "Recorrimos muchos lugares y fue una experiencia muy linda, teníamos un profesor de canto que venía desde Pilar, no recuerdo su nombre, pero era groso. Ese fue el puntapié de mi carrera", detalla Herlin, que, con el tiempo, participó del coro Argentina Gospel Choir durante dos años. Junto a 170 cantantes, el exaltacrucense se presentó tres veces en el Centro Cultural Kirchner, que describió como "una experiencia única".
Pese a que su vocación y su pasión está en la música, Sergio Herlin es licenciado en Enfermería y con ello se gana la vida. "De a poco me fui pagando la carrera de técnico en enfermería, que era un convenio que tenia el gobierno provincial de aquella época con el municipio y el Hospital San José de Exaltación de la Cruz. Aprendí muchísimo y llegué a ser coordinador e instructor de práctica de los ingresantes", afirma. Con 32 años, Herlin viajó a la capital bonaerense para estudiar en la Universidad Nacional de La Plata, donde se recibió de licenciado.
Tras volver al municipio que lo vio nacer, Serge desarrollaba sus tareas sanitarias en el hospital local, y en paralelo, trabajaba en un sanatorio de San Isidro. Luego de desempeñarse en obras sociales y prepagas, el cantante asegura: "Me acomodé económicamente gracias al sacrificio, y aprendí mucho de eso, pero no le estaba dando mucho tiempo a mi verdadera pasión. En ese momento, hace cuatro años y por una persona en común, conocí a Florencia Rovero, una profesora de canto con la cual aprendí muchísimo. Ella me terminó de acomodar la voz y fue lo que realmente me motivó, ahí dije esto es lo que me gusta y es lo que me apasiona".
Con el impulso de su mejora vocal como bandera, Serge conoció a Martín Di Lacio, el productor de sus canciones, quien lo contactó con Leonel Bird, su representante. "El hecho de trabajar con ellos me motiva mucho, formamos un gran equipo. Hay una energía especial y eso es lo que rescato. Junto con Leonel compusimos "Empezar", su energía joven y mi experiencia da buenos resultados", detalla Herlin, quien a lo largo de su vida fue inspirado por cantantes como Sandro, Camilo Sesto, María Graña, Raphael, Luis Miguel, David Bisbal, Marc Anthony, Luis Fonsi y Luther Vandross.
A pesar del envión musical que atraviesa, Serge hace hincapié en "disfrutar el día a día". "El mundo de lo artístico tiene sus altas y sus bajas. Me encantaría poder mostrar mi arte al público, porque me encanta estar en contacto con la gente y es eso a lo que aspiro. Todo artista idealiza con un estadio o un teatro, pero no quiero generar ansiedad. Trato de disfrutar el momento del dia a dia, disfruto grabar en el estudio, disfruto esta entrevista, una clase más de canto, ir a una radio... disfruto el proceso. Lo demás lo dejo a lo que tenga que ser, porque soy un convencido de que lo que tenga que pasar, va a venir", afirma.