El clásico rosarino entre Newell's y Central sumó un nuevo capítulo de vergüenza para su rica historia: el partido de Reserva que ambos clubes debían disputar este miércoles por la séptima fecha del Torneo Proyección fue suspendido porque las autoridades de la entidad de Arroyito consideraron que no estaban dadas las condiciones de seguridad para jugar el encuentro con público local.
El partido estaba previsto para las 11 en el estadio Coloso del Parque, donde unos cinco mil hinchas de Newell's concurrieron para presenciar el compromiso. "El colectivo de Central no salió por una cuestión de seguridad, que no estaba garantizada", reportó un vocero de Central a la agencia Télam. Más tarde, el club de Arroyito emitió un comunicado en el que explicó la situación.
"No hubo reunión entre las partes para garantizar la seguridad que corresponde a un partido en el que se decidió, en forma unilateral, la presencia de 5 mil hinchas locales. Asimismo, la Municipalidad no estaba en conocimiento del evento ni de la cantidad de participantes invitados por el club al partido, por ende no estaba habilitado el encuentro ni la cantidad de gente; no pudiendo entonces siquiera garantizar que ingresen las personas habilitadas", informó Central a través de un comunicado en el que explicó los motivos de su decisión de no ir a jugar.
En la publicación, Central aseguró que con la resolución de jugar con público local "no se respetó el principio de reciprocidad" ya que recordó que "para el Clásico anterior, en el que Rosario Central fue local en el predio de Arroyo Seco, se habilitó la presencia de 30 personas de cada club y que el partido se jugara sin público, teniendo en cuenta también los graves incidentes que se registraron la última vez que Central disputó un Clásico en condición de visitante".
Para Central, no había garantías de su seguridad porque no se le informó como funcionaría el operativo. "Central desconoce, porque no fue informado, cuáles son los detalles del operativo de seguridad para un partido que tendrá 5 mil hinchas en una tribuna. De esta manera, no se cuenten con garantías para quienes acompañen a la delegación, y para el propio plantel, en cuanto al ingreso, permanencia y egreso", completó el comunicado del club, que indicó que se presentará al partido "cuando estén dadas las condiciones de seguridad para cuidar como corresponde a los equipos, las instituciones y al propio Clásico rosarino, realizando un trabajo en conjunto entre las instituciones".
A pesar de la suspensión, el plantel de Newell's llevó adelante el calentamiento como si el partido fuese a jugarse y luego salió al campo, donde fue recibido por sus hinchas. A través de su cuenta de X, el club rojinegro responsabilizó a su clásico rival por la suspensión y aseguró que la seguridad estaba garantizada.
"Debido a la falta del equipo visitante, la terna arbitral se vio obligada a suspender el partido. Las condiciones fueron establecidas por La Liga y los organismos de seguridad competentes. A pesar de que el operativo se estaba desarrollando de manera normal y habitual, Central tomó la decisión unilateral de no venir a disputar el encuentro", expresó la entidad del Parque Independencia en la red social.