Rosario fue escenario durante las últimas cuarenta y ocho horas de una agria lucha intestina en el Ministerio Publico Fiscal local, así como entre dos organizaciones narcos, crecidas al calor de la complicidad policial. Es que mientras dos fiscales comenzaron a ventilar el martes los primeros esbozos de chats telefónicos entre una imputada por ser la testaferro de un líder narco y un fiscal de la misma Agencia de Criminalidad Organizada, con quien trabajaba como informante, dos sujetos en moto balearon una estación de servicios de zona norte, hiriendo a un chico de 17 años en su pierna, tras lo cual dejaron un cartel con amenazas justamente hacia los dos señalados en las escuchas: el fiscal Matías Edery y Mariana Ortigala. Difícil sería despegar esos dos hechos de esta trama, que en la tarde de ayer tuvo su pico culminante con la difusión de las transcripciones, que ponen en tela de juicio el rol del fiscal antinarcos. 

Lo curioso es que los fiscales Pablo Socca y Miguel Moreno -quien es un experto en lavado de activos, pero que justamente falló cuando debió investigarlo a Pillín Braccamonte- habían recibido una nota firmada por la mismísima fiscal regional María Eugenia Iribarren para manejarse con cautela. La jefa de los fiscales rosarinos reveló a Rosario/12 que: "estos fiscales ( Socca y Moreno) hicieron una presentación a la fiscalía regional de algunas situaciones que se expusieron en la audiencia y que correspondían al teléfono de las imputadas en esa causa. A partir de la evidencia que se presentó en esta audiencia, los fiscales hicieron una serie de inferencias entre las cuales podían haber omisiones de un fiscal, por lo que es obligación de los fiscales como funcionarios públicos hacer la denuncia ante cualquier hecho que tomen conocimiento y que pueda tener apariencia delictiva, sino ellos cometerían un delito. Por lo que yo dispuse la iniciación de un legajo penal, además de la intervención de la auditoría, ya que debe ser en ese ámbito donde se investigue la conducta del fiscal y donde pueda ejercer su derecho de defensa ya que él no participaba de aquella audiencia".

Iribarren había adelantado a sus subordinados que no debían difundir ni la información vertida por Mariana Ortigala, a la que imputaban, ni que ella era utilizada como informante de asuntos de sectores del campo criminal. En esa directiva la fiscal regional de Rosario también señalaba que Edery había comunicado a las autoridades superiores de los informantes que utilizaba y que eso estaba reglamentariamente admitido. Peor l aparecer los fiscales rechazaron esa recomendación directa.

Por eso es dificil separar aquella exposición con el hecho más grave  de todos, que fue sin dudas el que  produjo a última hora del martes cuando al menos dos sicarios balearon una estación de servicio YPF en el cruce de Marull y Rondeau, en la zona norte de Rosario, frente a 40 alumnos de un colegio que aguardaban abordar una serie de camionetas Trafic para dirigirse a la provincia de Córdoba. Un alumno de 18 años resultó herido en una pierna y fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez. Los sicarios dejaron entonces una nota dedicada a Edery y a Ortigala. Edery es uno de los principales investigadores dedicados a perseguir a Los Monos. Ortigala esta siendo acusada como cómplice de “Guille” Cantero. Ortigala, detenida la semana pasada por una serie de extorsiones y ataques a tiros al dueño de una agencia de quinielas, ya fue imputada.

Con respecto al herido, Jorge Bitar, director del Hospital de Emergencias de Rosario, aseguró que el joven recibió un disparo de arma de fuego en el muslo derecho, con orificio de salida. “Tiene una pequeña fisura de una de las capas del fémur, pero sin compromiso vascular, está estable, fuera de peligro”, agregó

En tanto cabe explicar que ayer se expusieron en una tercera jornada de audiencias una serie de audios entre un funcionario del Ministerio Público de la Acusación y una informante, que ayer fueron ventilados en el marco de un audiencia imputativa por extorsiones que tiene en el banquillo de los acusados a "Guille" Cantero y a otras ocho personas. De acuerdo a la información trascendida, los audios extraídos de uno de los teléfonos secuestrados a Ortigala revelaron conversaciones con el fiscal Edery, de Agencia de Delitos Complejos y Criminalidad Organizada, que ponen en entredicho su conducta.

El nombre de Mariana Ortigala no es nuevo. Fue una testigo clave contra Esteban Lindor Alvarado y blanco de un atentado a balazos del que se salvó milagrosamente. Y, el pasado 11 de septiembre, fue detenida, junto a su pareja, acusada de ser parte de una banda, liderada por Cantero desde prisión que se dedica a las extorsiones. Así lo evidenció la investigación que llevaron adelante los fiscalespor los ataques y extorsiones al dueño de la agencia de quiniela El Califa.

De acuerdo a lo argumentado por Socca y Moreno al momento de pedir la prisión preventiva para los acusados, se estaba produciendo un hecho de "extrema gravedad institucional", y expusieron conversaciones de whatsapp entre el fiscal Edery y Ortigala que suponen un intercambio de información. Cabe aclarar que en el año 2021, Ortigala fue puesta en la lista de informantes que el funcionario del MPA entregó a sus superiores.

Sin embargo, tanto Socca como Moreno criticaron los intercambios, aseguraron que cierta información que Ortigala le daba a Edery no llegaba a la Fiscalía y remarcaron que “la colaboración a la Justicia no se puede pagar con impunidad”.

El fiscal Miguel Moreno dijo que Ortigala no estaba en peligro por lo que ellos divulgaran en la audiencia. "Quien eligió ponerse en peligro fue Ortigala. Llegó a la fiscalía a declarar contra Alvarado porque se cambió de facción, no porque quiso dejar de delinquir. No es ningún ejemplo para el sistema ni debería ser considerado útil. Mañana estará en otro lugar y declarará a favor de sus circunstanciales aliados. Es una aberración que haya sido una testigo protegida. Debió en todo caso ser incluida como arrepentida dentro de la estructura de Cantero. La comunidad tiene que saber por qué se le va a dar prisión preventiva. Esto es de máxima gravedad", dijo.