Defensa y Justicia, "el Halcón" del municipio bonaerense de Florencio Varela, volvió a ser noticia en los últimos días luego de que se conociera el ranking mundial de clubes del Instituto de Historia y Estadísticas de Fútbol -IFFHS-, que lo ubicó como el equipo argentino mejor rankeado en todo el planeta. El conjunto verde y amarillo, que alcanzó el puesto 40 y superó a los clubes más grandes del país, cuenta con una historia basada en la humildad, el orden y el constante crecimiento, pilares que lo impulsaron a competir en el mayor nivel internacional y a obtener títulos que, años atrás, pintaban inalcanzables.

A lo largo de los últimos años el Estadio Norberto "Tito" Tomaghello, ubicado en Humahuaca y 501, fue testigo de los momentos de gloria que atraviesa el Club Social y Deportivo Defensa y Justicia. La humilde institución, creada en 1935 y semifinalista de la actual Copa Sudamericana, impulsó a partir de su estadía en la Primera División un estilo de juego que significó réditos económicos, deportivos y un reconocimiento a nivel continental que coronó en el 2021, cuando luego de ganar la Copa Sudamericana, con un tal Enzo Fernández en sus filas y con Hernán Crepo como DT, se impuso ante el imponente Palmeiras, entonces campeón de Copa Libertadores, en la Recopa Sudamericana de aquel año.

Enzo Fernández y su explosión futbolística en Defensa y Justicia

Días atrás, el conjunto varelense revalidó ese reconocimiento al alcanzar el cuadragésimo lugar del ranking mundial de clubes de la IFFHS, que ordenó a los equipos según un puntaje acumulado desde el 1 de septiembre de 2022 hasta el 31 de agosto de este año. La IFFHS desarrolla este ranking desde 1991, y para ello, tiene en cuenta diversos aspectos de la competencia, que van desde los títulos obtenidos hasta la cantidad de partidos ganados, los goles a favor, y en contra, entre otros datos estadísticos. La institución está reconocida por la FIFA y cuenta con el apoyo logístico del máximo ente del fútbol, ya que este le brinda acceso exclusivo a sus archivos. Pese a ello, la FIFA remarcó que la clasificación de clubes de fútbol y los reconocimientos que otorga la IFFHS son independientes a los suyos.

El podio del ranking 2023 lo encabezan Manchester City, Real Madrid y Flamengo. Con 163,5 puntos, Defensa y Justicia superó por dos escalones a Boca Juniors, el club argentino que más cerca quedó del Halcón. Dentro del pelotón de los mejores 100, también quedaron Estudiantes de La Plata en el puesto 45, Racing Club de Avellaneda en el 54, River en el 67, San Lorenzo en el 70, y Newell's Old Boys en el 83.

A diferencia de los equipos argentinos que integran el ranking, Defensa y Justicia cuenta con una serie de particularidades que aumentan el valor de sus logros. La institución varelense se afilió a la AFA recién en 1978, cuando ingresó en la cuarta y última categoría del fútbol argentino, la Primera D. Por aquel entonces, por ejemplo, Estudiantes de la Plata ya era tricampeón de América y campeón mundial, mientras que Boca, River, Independiente, San Lorenzo y Racing ya estaban consolidados como los más grandes del país gracias a los títulos que cosechaban año tras año. 

Pese a su tardía afiliación al fútbol de AFA, Defensa y Justicia había sido fundado en marzo de 1935 por un grupo de pibes que pasaban el rato en la calle Mitre, y que encontraron en el baldío lindero un espacio para pelotear. Durante las décadas posteriores, la institución que hasta ese momento llevaba los colores azul y blanco y que se destacaba en torneos zonales de fútbol y básquet, se transformó en una referencia dentro del municipio varelense al acobijar diversas actividades sociales que daban lugar al encuentro de toda la comunidad.

Tras su ingreso en AFA, la institución de Florencio Varela construyó a contrarreloj los cimientos del estadio que lleva el nombre de su presidente de aquel entonces, Norberto Tomaghello. Debutó en la Primera D en 1978 y solo cuatro años más tarde ascendió a la Primera C, categoría que transitó tres cortos años, ya que en 1985 ascendió a la Primera B. El meteórico ascenso a la segunda categoría del fútbol argentino trajo consigo un quiebre en su historia, sus colores y su apodo. Para el año 1985, asumió como mandamás de la institución Ricardo Pérez, que a su vez presidía la compañía de Transportes El Halcón, la famosa línea 148 que recorre el sudeste del Gran Buenos Aires, desde Constitución hasta Florencio Varela. El apoyo económico que brindó la empresa de Pérez, hizo que Defensa y Justicia adoptara los colores del colectivo verde y amarilla y su nombre como apodo, "el halcón".

En 1986, la reorganización de los torneos de AFA catapultó al conjunto varelense al recién creado Nacional B, que oficia como segunda categoría hasta el día de hoy bajo el nombre Primera Nacional. Con solo 9 años en el fútbol oficial, Defensa y Justicia se codeaba entre los clubes importantes del ascenso que buscaban un lugar en la máxima categoría. La empresa El Halcón, según cuentan los viejos seguidores de Varela, prestaba más de 50 colectivos cada fin de semana, para que la hinchada del halcón se trasladara a la cancha de turno. Pese a descender a la tercera categoría durante cinco años, Defensa y Justicia regresó a la B Nacional en 1997 y se mantuvo allí hasta 2014, cuando de la mano de un joven entrenador como Diego Cocca, ascendió a la A por primera vez en su historia.

A partir de su estadía en la máxima categoría del fútbol argentino, el conjunto varelense fijó sus prioridades: expansión de la infraestructura, fomento a las divisiones inferiores y apuestas a jugadores jóvenes sin lugar en clubes importantes. Esta mezcla generó que, por ejemplo, Defensa y Justicia llevara a préstamo a futbolistas que tiempo después se consagraron campeones mundiales, como Nahuel Molina Lucero, Lisandro Martínez y Enzo Fernández, quienes ante la falta de oportunidades, recalaron en Varela para adquirir ritmo futbolístico y que, gracias a la estructura y la idea de juego que persistió a pesar de los cambios de DT, demostraron todo su talento para luego expandirse al fútbol europeo.

Defensa y Justicia, a nivel nacional, fue subcampeón en la temporada 18/19 y en 2021. Su debut internacional se dio en la Copa Sudamericana de 2017, torneo que disputó de manera consecutiva durante los dos años posteriores. En 2020 participó por primera vez de la Copa Libertadores, y tras quedar tercero en la fase de grupos, clasificó directamente a la Copa Sudamericana de aquel año, que finalizó en enero de 2021 con el halcón imponiéndose por 3 a 0 ante Lanús, en el estadio Mario Alberto Kempes. Tras coronarse campeón, la Recopa Sudamericana dijo presente y el equipo de Varela metió el batacazo en Brasil, al imponerse en la serie de penales tras un empate 3-3 en el resultado global.

Por las semifinales de la Copa Sudamericana 2023, los miércoles 27 de septiembre y 4 de octubre, Defensa y Justicia enfrentará a Liga de Quito de Ecuador en busca de alcanzar una nueva final internacional. El conjunto varelense, dirigido por Julio Vaccari y con figuras como Nicolás "Uvita" Fernández, Gastón Togni, David Barbona y Santiago Solari, que son secundadas por la experiencia del "Beto" Bologna en el arco y la firmeza defensiva de jugadores como Tomás Cardona, Agustín SantAnna y Alexis Soto, dejará la vida por llevar a la cima al municipio bonaerense de Florencio Varela, que parió al mejor equipo argentino de la actualidad.