Un avión que transportaba a 81 pasajeros, entre los que figuraba la delegación del club de fútbol Chapecoense de Brasil, se estrelló anoche en Colombia, cuando se dirigía hacia la ciudad de Medellín, donde mañana debía disputar con Atlético Medellín la primera final de la Copa Sudamericana de fútbol.
El saldo fue 76 muertos y cinco sobrevivientes (un periodista, una azafata y tres de los jugadores del Chapecoense, Ruschel, Neto y Follmann), quienes fueron derivados al hospital San Juan Dios de La Ceja. El delantero argentino Alejandro Martinuccio, que integra el plantel de Chapecoense, no viajó a Medellín porque estaba lesionado.
Según la cuenta oficial de Twitter de la Aeronáutica Civil de Colombia (Aerocivil-Col), una nave procedente de la ciudad boliviana de Santa Cruz de la Sierra, cayó a tierra cerca de las 21.30 de Colombia (23.30 de la Argentina) “en el Cerro El Gordo, en cercanías del Municipio de La Unión, Antioquia”, a unos 50 kilómetros de Medellín.
Según lo reportado por autoridades de la estación aérea, situación que reprodujo Radio Caracol, “el avión reportó fallas eléctricas y luego falta de combustible”.
El avión, que transportaba a 72 pasajeros y 9 tripulantes, pertenecía a la empresa boliviana Lamia. La misma nave fue utilizada por la Selección Argentina hace 18 días, para trasladarse desde Belo Horizonte a Buenos Aires, tras la goleada sufrida con Brasil por las eliminatorias mundialistas. El avión tenía 17 años de antigüedad.
El equipo brasileño de Chapecoense accedió a la final del certamen continental tras haber eliminado a San Lorenzo (1-1 y 0-0) en los dos encuentros semifinales.