El 70% de los clubes con equipos femeninos del fútbol chileno fueron multados por la Dirección del Trabajo de ese país por no cumplir con los contratos, entre otras promesas de profesionalización, según informó FIFPro. Desde FIFPro, el sindicato mundial de futbolistas profesionales, explicaron que 25 de los 36 equipos profesionales de Chile mostraron falta de garantías de la normativa laboral, de seguridad social y salud y de seguridad, por lo que deberán pagar multas económicas por un total de unos 230.000 dólares.
Las inspecciones del Gobierno chileno encontraron violaciones como no proporcionar ropa de trabajo, falta de servicios higiénicos para las futbolistas o no pagar las cotizaciones a la seguridad social. Las auditorías fueron el resultado de la nueva ley de profesionalización gubernamental y la petición del sindicato chileno de futbolistas ANJUFF: la ley establece que el 50 por ciento de las jugadoras deben tener contratos profesionales.
La vicepresidenta de FIFPro y directora y fundadora de la Asociación Nacional de Jugadoras de Futbol Femenino (ANJUFF), Camila García, resaltó la investigación llevada a cabo después de 16 meses de la promulgación de la ley de profesionalización. "Es profundamente preocupante que algunos clubes aún no cumplan con el requisito de contratar al menos al 50 por ciento de sus futbolistas en este primer año, pero lo que es verdaderamente inaceptable es que los clubes no cumplan con las normas mínimas para que las jugadoras puedan desempeñar sus funciones como trabajadoras”, afirmó.
De los 36 clubes profesionales femeninos de Chile, 14 pertenecen a la primera división y 22 a la segunda. Los clubes señalados por la Dirección del Trabajo que no cumplían con los cupos legales del 50% de contratadas al momento de la fiscalización fueron Cobreloa, Audax Italiano, San Marcos de Arica, Club Deportivo Barnechea, Deportes Valdivia y Lautaro de Buin.
"Seguiremos insistiendo en que los jugadores son trabajadores. Lo mínimo que se espera de las sociedades anónimas deportivas es que cumplan con la legislación laboral del país y, al menos, que no agraven las brechas de género dentro de la industria", concluyó García.