Y un día ocurrió. Luego de haber sido relegado a un obligado segundo plano por su derrota en las PASO, Horacio Rodríguez Larreta volvió a la campaña. Le tocó subirse a la Patoneta, el motorhome que Patricia Bullrich viene utilizando en la previa electoral. El jefe de Gobierno aceptó el convite en una nueva señal de unidad para un espacio que está en constante sospecha de romperse. "¡Vamos a fondo con la Patoneta recorriendo el conurbano y todos los puntos del país!", le puso entusiasmo Larreta como en otro tiempo decía: "¡Vamos las swifties!".
El armado del encuentro no tuvo demasiado secreto, según pudo reconstruir este diario. En los días posteriores a las PASO, Larreta y Bullrich tuvieron su foto de unidad y acordaron que Larreta la iba a acompañar en la campaña. Cómo y cuándo quedó en manos de sus adláteres, Juan Pablo Arenaza por el lado de Bullrich y Eduardo Macchiavelli por el lado de Larreta.
Negociaciones previas
Pero el tiempo pasaba y en el larretismo observaban que no había lugar en la campaña para su líder. "Si no nos llaman, tampoco es que vamos a ir a golpear la puerta", decían. No obstante, la necesidad tiene cara de hereje y Bullrich está echando mano a todos los recursos que puede para entrar al balotaje: subirse a cuanta victoria radical encontró en las últimas semanas, presentarlo a Carlos Melconián como su eventual ministro de Economía y ahora sacarse fotos con un viejo enemigo.
Desde el entorno de Bullrich, indican que la convocatoria fue bastante sencilla: revisaron agendas, vieron que Larreta estaba de viaje por Estados Unidos la semana pasada, por lo que acordaron para esta semana. Desde el espacio de Larreta suman que se eligió la Tercera Sección electoral porque es un territorio donde pueden crecer en votos.
Y advirtieron que Larreta le quería dar una mano al candidato a intendente por Lomas de Zamora, Guillermo Viñuales, quien ganó la interna municipal pese a que acompañaba a Larreta: "Está muy solo. La gente de Bullrich no le da ni bola, porque no era de ellos", indicaron. "No obstante, es uno de los distritos donde numéricamente más votos se pueden obtener", analizaron.
Excursión en Patoneta
La foto con Larreta vino después de la que se sacó Bullrich con Gerardo Morales, el otro integrante de la fórmula perdedora. La acompañaban su candidato a gobernador Néstor Grindetti, pero también Diego Santilli y Cristian Ritondo, además de Viñuales. "Vamos a seguir trabajando juntos y unidos por los argentinos", dijo Larreta.
Por su parte, Bullrich disculpó a Morales por haber compartido una foto con Sergio Massa (la misma que luego Javier Milei usó para dar a entender que los radicales ya la habían abandonado). "Era un acto institucional", destacó Bullrich, "que un funcionario haga politiquería en un acto institucional no es culpa del que va. Es mala práctica política del que lo hace. Estuve con Morales en Jujuy y lo aclaró. Dijo: 'Estoy cien por ciento en la campaña' y 'soy soldado de Patricia para acompañarla".
Que tanto Macri como Morales estén permanentemente aclarando que siguen apoyando a su candidata a presidenta seguramente dice algo del momento político.
Del encuentro participó también Ritondo, quien siempre fue un hilo conductor entre distintos sectores (de hecho, el día previo estuvo almorzando con Larreta). El candidato señaló: "Hay un liderazgo claro que es el de Patricia, donde Horacio se suma a la campaña, porque tiene mucho para aportar en experiencia. Hoy Juntos por el Cambio está unido, trabajando por el mismo plan de gobierno".
Por ahora, no tenían previsto nuevos actos de campaña de Larreta con Bullrich. Habrá que ver si las fotos se repiten en las próximas semanas o si una travesía en la Patoneta ya fue suficiente para todos los involucrados.