Mi percepción sobrevuela un rayo.
Soy un animal de cielo eléctrico.
Melodía, armonía, crispación y crispación.
Plano inclinado, intermitencia violeta. Estampida y estampita.
Santa Irregularidad es la patrona de los dibujitos animados.
Devenir danzarín del fuego. La instancia avanza en flagrante concatenación. Tener contrastes no se compara con ningún otro estado. Soy un ñandú, pronto una marca de cosméticos anti‑edad para no nacidos y acaso ayer es como si viésemos a mañana desde el otro lado del espejo.
(De poder explicar, aunque carezca por el momento de la demostración fáctica, quién es el que refleja a quién, sería Dios, Hegel y Lenin juntos, y acabaría, de un plumazo, con las ineficaces teorías sobre el realismo).
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*¿Estaré en lo correcto tratando de aplicar teorías realistas sobre la génesis de los dibujos animados?
**Apreciación personal: el realismo no tiene la culpa de nada. La responsabilidad les compete exclusivamente a ciertos pensadores incapaces de canalizar la frustración de no poder escribir dos líneas de ficción.
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Azar del propicio contexto, equilibrio desencajado.
Rima en el movimiento, líneas que traspasan la bidimensión.
Acme es una cinta métrica que le resta magnitud a la distancia.
¿Hay más premura que necesidad?
Esa es la mejor pregunta que le cabe al coyote cayendo.
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Por favor. Cuando harto de la fealdad, con la espalda doblada por el peso de la estupidez, corro a encerrarme dentro de un dibujo animado, no sigan trayendo, en busca de solución, a ese psiquiatra. Si acuden al rescate prescindan del veredicto prosaico de la pauta social.
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Tito Pompidour me llamaré de ahora en más.
¡Vaya nombre con charme, viril, sexy!
Tito Pompidour, el héroe que nació de un hombre para volverse dibujo animado. Reencarnación anhelada. Tao total.
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¿Creyeron que yo es un estilo al que eché mano como buen artífice de la lengua que soy? No son la clase de receptores que anhelo. Pertenecen a la peor calaña de lectores, la de los fáciles. ¿Sentirían vergüenzas en usar vuestro propio pronombre de haber quedado, efectivamente, alguna vez atrapados en medio de un dibujo animado? ¡Los desprecio! No vuelvan a posar sus maltrechas pupilas sobre un renglón proveniente de mi pluma.
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El dibujo que antecede es fotograma de un corto realizado por mí.
Pertenezco a la primera camada de egresados de la Escuela Para Animadores de Rosario.
