Agentes de la Dirección General de Aduanas (DGA) allanaron las sedes de 18 bancos, ocho estudios contables y 25 sociedades denunciadas por la fuga de 400 millones de dólares que realizaron 176 empresas, a través de falsas importaciones.
Las operaciones desbaratadas fueron hechas por varias financieras y sociedades sin capacidad económica ni empleados que entre los años 2020 y 2022 hicieron giros de dinero sin haber importado nada.
Las maniobras habían sido hechas el Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI), que en octubre de 2022 fue sustituido por el Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA). Es decir que utilizaron documentación y SIMIs falsas con el único objetivo de fugar divisas al exterior.
Los giros se efectuaron a 146 firmas estadounidenses de dudosa constitución –fundamentalmente LLCs radicadas en Delaware y La Florida- que están vinculadas a argentinos.
Los allanamientos estuvieron a cargo de la División Lavado de Activos de la Policía Federal y se realizaron en entidades ubicadas en el microcentro porteño y las ciudades de Rosario, Córdoba y Bahía Blanca.
En el caso de algunos estudios contables y jurídicos, se armaban las empresas y en otros ofrecían aumentar la capacidad económico financiera a quienes giraban las divisas.
Muchas de las empresas allanadas –señaló Aduana- no estaban habilitadas como importadores o exportadores, sino que fueron incluidos en la base de usuarios de comprobantes apócrifos y creadas solo para realizar este tipo de conducta ilícita.
Aduana puso en conocimiento de la situación al Homeland Security Investigations de Estados Unidos para recabar información de las empresas en ese país y que también brinde información sobre los beneficiarios finales de las empresas radicadas allí.
Los procedimientos policiales de esta mañana fueron ordenados en el marco de la causa 452/23 del Juzgado Nacional en lo Penal Económico N° 2 a cargo de Pablo Yadarola y de la Fiscalía Nacional en lo Penal Económico N° 6 a cargo de Jorge Dahlrocha.
La investigación surge de un cruce sistémico efectuado por la Aduana, que comparó los giros de divisas cursados con los bancos con las importaciones que nunca efectuaron los falsos importadores.
En ese cruce se detectaron SIMIs falsas, que habrían sido realizadas con la connivencia del personal del sector de comercio exterior de diversos bancos y financieras.
Según se informó, el sistema SIMI no tenía trazabilidad del giro contra la importación de mercadería. Por este motivo, fue solucionado con la implementación del Sistema SIRA que contiene un cruce sistémico y una cuenta corriente con el Banco Central (BCRA).
La denuncia se encuentra encuadrada en los artículos 864 inciso b y 865 inciso f del Código Aduanero, y la Aduana se encuentra presentada como parte querellante.