Reptiles 7 puntos

Reptile, Estados Unidos, 2023

Dirección: Grant Singer

Guión: Benjamín Brewer, Benicio del Toro y Grant Singer

Duración: 134 minutos

Intérpretes: Benicio del Toro, Justin Timberlake, Alicia Silverstone, Michael Pitt, Eric Bogosian, Amy Parrish, Frances Fisher.

Estreno: Disponible en Netflix.

Policial negrísimo, Reptiles marca el debut en la ficción del hasta ahora exitoso director de videoclips Grant Singer, quien en ese rubro trabajó con artistas muy populares como Ariana Grande, The Weekend, Lorde y J. Balvin. El dato, que podría sonar a advertencia, prevención y hasta a prejuicio, quizás sirva para explicar la presencia del cantante pop Justin Timberlake en un importante papel de reparto. Aunque Timberlake ya cuenta con una profusa carrera como actor y acá vuelve a dar pruebas de cierta solvencia que le dan soporte. También podría resultar significativo por la inclusión de la reaparecida Alicia Silverstone, estrella de los ‘90, que justamente se hizo famosa protagonizando la trilogía de videoclips más popular de esa década, la de las canciones “Crazy”, “Amazing” y “Cryin’”, de Aerosmith. Aunque después la rompió en Ni idea (1995), clásico del cine adolescente de Amy Heckerling.

Incluso el protagonista de Reptiles, Benicio del Toro, comenzó su carrera como el sonriente joven latino que, sentado sobre el capot de un auto, cruza con Madonna una mirada tan breve como intensa sobre el final del videoclip de “La isla bonita”, antes de alcanzar estatus de estrella en Hollywood. La confluencia de estas cuatro historias de origen en una misma película revela que la industria de los videoclips no solo no es ajena a la del cine, sino que sus sets son una verdadera escuela tanto para actores como para cineastas o técnicos. En el caso de Singer, hay algo en la precisión del montaje o el aprovechamiento dramático del diseño sonoro que tal vez se le pueda atribuir a esa experiencia previa.

Sin embargo, no debe entenderse por esto que la película se parezca a un videoclip, pero es evidente que la experiencia de realizar casi 30 videos musicales le dio a Singer cierta habilidad en el manejó de los recursos del relato audiovisual. En especial a la hora de buscar impactos en los que lo visual y lo sonoro se combinan para influir en el espectador. Una de las secuencias iniciales, la inmediatamente anterior a la aparición del título de la película, es una muestra clara de esa capacidad. En ella se expresa el clima oscuro y ominoso sobre el que se irá construyendo Reptiles, que por momentos hace recordar al de Pecados capitales, de David Fincher, otro director que rodó más de 50 videoclips antes de debutar con Alien 3 (1992).

El disparador es el asesinato de una joven que trabaja en el negocio inmobiliario, dentro de una de las casas que debía vender. El que encuentra su cadáver brutalmente apuñalado es su novio y socio (Timberlake). A partir de ahí Reptiles gira en torno a la investigación, llevada adelante por un experimentado policía (Del Toro), quien está en pareja con la sobrina de uno de sus superiores (Silverstone). Si bien la historia avanza sobre los pormenores del caso, de a poco toma cuerpo una subtrama que desarrolla el vínculo que mantienen los distintos miembros de la fuerza, en la que el delito y lo policial serán puestos a correr en paralelo, para generar una sensación de laberinto hermético.

La película registra más de un acierto en materia de casting. Como la inclusión de un irreconocible Michael Pitt, en uno de esos papeles sórdidos que le quedan tan bien. O en la aparición de Eric Bogosian, famoso en los '80 por La radio ataca. Pero sobre todo en el trabajo de Del Toro, quien logra dotar a su personaje de una dualidad en la que la dignidad convive con una sensación de violencia contenida de principio a fin. La fotografía también contribuye en la atmósfera oscura de Reptiles, aporte de Mike Gioulakis, conocido por su trabajo en obras maestras del terror moderno como Te sigue (2014) y Nosotros (2019). Y quien, sí, también realizó la fotografía de muchos videoclips, entre ellos el de la canción “Great Escape”, de Tini Stoessel.