Conforme pasan los días, queda cada vez más en evidencia que la postura antiderechos, autoritoria y negacionista del sector representado por los liberales, con Javier Milei a la cabeza, no es solo slogan de campaña sino una ideología férrea en cada uno de sus integrantes. En las últimas horas, fue el legislador tucumano Ricardo Bussi, y aspirante a diputado nacional por la Libertad Avanza (LLA), quien se atrevió a comparar a las identidades de género con una discapacidad, y aseguró que a las personas trans-travestis  el Estado no las debe ayudar porque representan "un gasto". Asimismo, y fiel a su legado como hijo del genocida Antonio Domingo, también se subió a la ola negacionista de la dictadura militar, y apuntó contra Patricia Bullrich.

"Son seres humanos que merecen todo nuestro respeto. Como los rengos, como los ciegos, como los sordos. Son pequeños sectores de la sociedad que tienen que ser reconocidos, claramente", indicó Bussi, en el marco de un debate entre candidatos a diputados nacionales, organizado por la Fundación Federalismo y Libertad, en Tucumán. 

Pese a la brutalidad de sus dichos, eso no fue todo, sino que fue subiendo de tono y agregó: "El que decide ser travesti, que se la banque solo. No se puede dar una cuota del Estado a alguien que pertenece a un grupo minoritario". 

"Lo que no queremos es que lo banquemos entre todos, porque el que decidió su camino sexual es responsable de sus decisiones, no tenemos porqué hacer cargo de eso a toda la comunidad", completó el candidato que acumula una denuncia por abuso sexual a una excompañera de trabajo.

El senador nacional Pablo Yedlin, quien también participaba del encuentro, cruzó a Bussi y le explicó que "el Estado tiene una responsabilidad sobre aquellos grupos más vulnerables y definitivamente la comunidad LGBTQ es un grupo vulnerable: viven menos años, tiene problemas de acceso al trabajo, tienen discriminación".

En ese mismo sentido, señaló que "eso es una responsabilidad del Estado, por eso creemos distinto, yo creo que el Estado tiene que estar presente, que tiene que arreglar para que todos corramos una carrera más o menos parecida". Y refiriéndose directamente al legislador tucumanó sumó: "Vos pensás que todos largamos del mismo lugar y que se salve el que pueda".

Negacionismo

Sin embargo, la exposición del candidato a diputado por LLA e hijo del genocida condenado por delitos de lesa humanidad, Antonio Domingo Bussi, no terminó allí sino que también se subió al discurso negacionista de su líder, Javier Milei. 

Apelando al mismo libreto que el economista, Bussi negó la cifra de desaparecidos, dijo que "la desaparición de una sola persona es lamentable", pero de inmediato relativizó diciendo que "ocurre en todas las guerras, y en Tucumán hubo una guerra". Asimismo, también justificó la muerte de "civiles inocentes".

Además, cuando mencionó a la organización Montoneros deslizó una chicana a la candidata presidencial de Juntos por el Cambio: "La parte de Montoneros la puede explicar Patricia Bullrich, que pertenecía a esa organización". 

Finalmente, repitió el discurso de Milei y Victoria Villarroel al hablar de un castigo "desigual" para los represores y los militantes. "La Justicia actuó parcialmente, con un ojo tapado, juzgó solamente a los militares y no juzgó a los Montoneros como Patricia Bullrich".

Bussi es hijo de Antonio Domingo, quien fue gobernador de Tucumán durante la dictadura militar y tuvo a su cargo la aplicación en esa provincia del Operativo Independencia, un despliegue militar implementado para combatir a la guerrilla rural que habilitó sistemáticas violaciones a los derechos humanos sobre la población civil.

Por esos hechos, Bussi (padre) -que en 1995 resultó electo gobernador de Tucumán- recibió condenas a reclusión perpetua que se dieron tras la anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final.