Commander, el pastor alemán del presidente estadounidense Joe Biden, fue expulsado de la Casa Blanca y se está evaluando su futuro, después de que el animal haya mordido a varios agentes del Servicio Secreto.

La noticia fue confirmada por Elizabeth Alexander, portavoz de la primera dama Jill Biden, a varios medios locales.

El hecho se conoce después de que la cadena CNN informara de que el pastor alemán se ha visto involucrado en más incidentes que los 11 confirmados hasta ahora por el Servicio Secreto, y que el animal ha mordido también a miembros del personal de la Casa Blanca.

En los últimos meses, varios de sus ataques salieron a la luz en los medios de comunicación. El más reciente ocurrió a finales de septiembre, cuando el perro mordió a un agente que tuvo que ser tratado por el personal médico del complejo. En noviembre de 2022, otro agente tuvo que ser hospitalizado tras ser mordido en los brazos y las piernas.

LImagen: Instagram/POTUS

Desde la Casa Blanca se indicó en julio que los Biden estaban contemplando someter a Commander a un nuevo entrenamiento para controlar la situación, pero este martes el mencionado canal de noticias dijo no tener confirmación de si este había tenido lugar.

Commander llegó a la Casa Blanca en diciembre de 2021 y fue un regalo que recibió el presidente de parte de su familia, meses después de la muerte de Champ, otro pastor alemán que acompañó a la pareja durante 13 años.

Commander podría ser enviado a la residencia de los Biden en Delaware. (Foto: AFP)

En la historia de EE.UU., la mayoría de las familias presidenciales han contado con la compañía de una mascota en la Casa Blanca: Barack Obama (2009-2017) tuvo dos perros de agua portugueses, Bo y Sunny, mientras que su antecesor, George W. Bush (2001-2009) convivió con tres canes y una gata.

Major, otro de los perros de los Biden, también fue enviado un tiempo a adiestramiento en Delaware, en 2021, para un curso de doma luego de morder al menos a un empleado de la Casa Blanca.

Por recomendación de especialistas, la familia Biden tuvo finalmente que separarse del perro y confiarlo a unos amigos que viven "en un ambiente más tranquilo". 

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