Durante el segundo debate presidencial 2023, Javier Milei, el candidato de La Libertad Avanza y referente del ultra liberalismo en el país, volvió a criticar el sistema de donación de órganos del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (Incucai) con afirmaciones infundadas y graves errores.
Según denunció, el organismo presenta una falla por la supuesta "corrupción" al sostener que "hay 7000 personas esperando un transplante y 300.000 potenciales donantes, y algo que no funciona en el medio".
Sin embargo, el Incucai aclaró días en la red social X (ex Twitter) que "para poder donar órganos, el fallecimiento de la persona que dona debe ocurrir en la terapia intensiva de un hospital", ya que allí existen los medios para la preservación de los órganos que pueden ser trasplantados.
Llegado el momento, los médicos determinan cuáles son los órganos aptos para el trasplante. En caso de los tejidos, no es necesario que la muerte se produzca en una terapia intensiva. Por estas condiciones y requerimientos, la posibilidad de ser donante de órganos se da en 4 de cada 1000 fallecimientos.
¿Cómo funciona la lista de espera del Incucai?
Existe una lista de espera única en todo el país para cada tipo de órgano controlada y fiscalizada por el INCUCAI. La distribución y asignación de órganos y tejidos se realiza mediante un sistema informático sobre la base de criterios médicos preestablecidos.
Principalmente, se tienen en cuenta la gravedad del paciente, la compatibilidad entre donante y receptor y el tiempo en lista de espera. "Este sistema asegura la equidad y la transparencia en la distribución", destacaron desde el Incucai.
En Argentina, se considera donante a toda persona mayor de 18 años que haya manifestado su voluntad afirmativa o que no haya dejado constancia expresa de su oposición. En el caso de los menores de 18 años, la autorización de la donación debe ser efectuada por sus responsables legales a cargo.