Las autoridades de la Unión Industrial Argentina (UIA) almorzaron ayer con el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne. El eje del encuentro con los directivos de la central fabril fue el proyecto de reforma tributaria impulsado por el Gobierno. Desde la cámara empresaria consideran que los cambios en el esquema vigente son necesarios para permitir “la llegada de nuevas inversiones”. La minimización de los impuestos a los ingresos brutos cobrados por las distintas provincias y la eliminación del impuesto al cheque son algunos de los elementos que, según trascendió, darán forma a los cambios. La propuesta, comentó Dujovne durante el convite, será presentada después de las elecciones.
El presidente de la UIA, Miguel Acevedo, indicó que el titular del Palacio de Hacienda no dio precisiones sobre la reforma impositiva, aunque aseguró que se tratará de una iniciativa “gradual”. Consultado respecto de la inflación, Acevedo afirmó que las partes analizaron la dinámica de precios y señaló que el funcionario “está convencido de que se va a llegar a la meta”, aunque el presidente del Banco Central ya está reconociendo su imposibilidad (ver aparte).
La industria es uno de los sectores más golpeados por el cambio de modelo económico. El sector está siendo afectado por el proceso de apertura comercial, la caída de la demanda interna por el menor poder adquisitivo de los salarios y la merma en las exportaciones hacia Brasil. El Indec informó la semana pasada que la actividad fabril mostró en junio una mejora del 6,2 por ciento interanual pero está 5,3 por ciento debajo de las cifras oficiales informadas para el mismo mes hace dos años. El vocal de la UIA, José Urtubey, subrayó que “no hablamos específicamente de reforma laboral”. Entre los temas abordados figuran además la situación de las golpeadas economías regionales.
